7/28/2011

¿Prejuicios sobre sexualidad en el siglo XXI?

El ingeniero Luis Orlando Abascal Barbán, de Bayamo, Granma, fue sancionado a separación definitiva de su puesto de trabajo, con cuatro años sin poder rehabilitarse, por tener en la  computadora portátil que tenía asignada como medio básico la serie de documentales titulada La guía sexual del siglo XXI

 

09:38 Francisco Rodríguez Cruz / 25-07-2011

 

Periódico Trabajadores

 

Los prejuicios de no pocas personas al abordar y conocer sobre la sexualidad humana son conocidos, pero tal vez sea menos frecuente que estos lleven a conflictos laborales como los que nos relata el ingeniero Luis Orlando Abascal Barbán, desde Bayamo, Granma.

 

Este trabajador de la empresa eléctrica provincial se desempeñaba como especialista B en máquinas eléctricas y equipos primarios de centrales y subestaciones eléctricas hasta febrero de este año, cuando fue sancionado a separación definitiva de su puesto de trabajo, con cuatro años sin poder rehabilitarse, por tener en la  computadora portátil que tenía asignada como medio básico la serie de documentales titulada La guía sexual del siglo XXI.

 

El material fue detectado en el equipo por una supervisión de una especialista en informática de dicha empresa y acto seguido una comisión disciplinaria determinó aplicar la citada medida, alegando que el material encontrado “si bien no se trataba de pornografía, su contenido es contrario al interés social y a las buenas costumbres, principios y valores éticos que caracterizan a la sociedad cubana”.

 

Por ser Luis Orlando un trabajador con buena trayectoria laboral y que nunca antes había sido sancionado, ello tuvo gran repercusión en su colectivo. Plantea que sabía de la auditoría informática, pero no borró la serie “pues no creí que el material fuera a ser visto de esa absurda manera”. Además tenía autorización para llevar la laptop diariamente a su casa, por lo cual no podían imputarle afectaciones al horario laboral.

 

Abascal reclamó ante el órgano de justicia laboral de base, porque incluso el reglamento de seguridad informática de la empresa autorizaba a “tener en las PCs videos (musicales, películas, seriales, novelas, documentales) hasta 4 Gb”.

 

En su defensa, el trabajador acudió a la opinión de la presidenta de la comisión provincial de educación sexual, la Máster en Sexualidad Zeida Santiesteban, quien evaluó el programa y emitió su juicio por escrito especificando “… su alto valor científico, técnico, didáctico y educativo y que resulta de interés general y de obligada

consulta no solo para los especialistas del área de la sexualidad sino para la población en general…”

 

Citó incluso una referencia hecha a esta serie en la sección Sexo sentido, del diario Juventud Rebelde, en su edición del 19 de marzo.

 

Luego de múltiples irregularidades en la actuación del órgano —según refiere Luis Orlando—, entre ellas dilaciones e imposibilidad de presentar sus pruebas, la reclamación fue dada sin lugar por el órgano y también por el tribunal municipal, que no tuvieron en cuenta la opinión de los especialistas ni el alegato de un abogado.

 

Envuelto en este conflicto que al afectado le parece “un cuento de Senel Paz” —escritor y guionista cubano  conocido por la película Fresa y chocolate—, este ingeniero no entiende por qué le aplicaron la sanción más extrema sin considerar su historial y conducta como trabajador; su condición de padre de familia, con dos niñas de 5 años y de 10 meses y la esposa de licencia de maternidad; y los criterios de los expertos sobre el carácter educativo de la serie. ¿Acaso es tan grave procurar información científica sobre la sexualidad, en la Cuba del siglo XXI?

7/27/2011

El presidente Chávez aboga por la inclusión de homosexuales en espacios para la juventud bicentenaria

El presidente Chávez aboga por la inclusión de homosexuales en espacios para la juventud bicentenaria

Nota enviada por A.C. DIVAS DE VENEZUELA

 

Prensa ASGDRe

 

Al anuncio de los resultados de la investigación científica hecha a los restos de Bolívar, así como a los 444 años de existencia de la ciudad capitalina, se suma el llamado que el presidente Hugo Chávez hizo el día de ayer, 25 de julio, para el apoyo e inclusión de la comunidad no heterosexual (lesbianas, trans, homosexuales) en el país.

 

Durante un contacto telefónico con el programa de la periodista Tania Díaz, transmitido por el canal del Estado, Venezolana de Televisión, el comandante presidente incorporó a “los homosexuales” como uno de los grupos que forman parte de la juventud venezolana y caraqueña, junto a los estudiantes, deportistas, entre otros.

 

En el marco de la aprobación de proyectos para la II etapa de recuperación del casco histórico colonial de Caracas, el presidente Chàvez mencionó la continuación de diversos espacios para el disfrute de los y las caraqueñas, como lo será un futuro centro para la juventud de Caracas que tendrá capacidad para unas cuatrocientas (400) personas y donde llamó a incorporar a todos los grupos que forman parte de la “muchachada”, incluyendo a los “homosexuales”.

 

En presencia del ministro del Poder Popular para la Cultura, Farruco Sesto, El alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez y la jefa de Gobierno del Distrito Capital, Jacqueline Farías, el presidente Chávez hizo esta histórica mención que establece un precedente histórico en los pasos dados por el Gobierno Bolivariano y la Revolución popular en materia de derechos humanos, especialmente lo referido a la sexo-género diversidad.

 

A la espera quedan las reacciones de los diferentes grupos y organizaciones de la diversidad sexual y de género, de toda esta comunidad en general, y de las instituciones del gobierno bolivariano con mayor responsabilidad en prestar atención a este llamado.

6/30/2011

Redes sociales del CENESEX recordaron Stonewall

Este martes 28 de junio las habituales peñas de la redes sociales del CENESEX se dedicaron a recordar los sucesos de Stonewal, hace 42 años. Las revueltas callejeras contra la represión que la policía de la ciudad de Nueva York tuvo contra gays y personas trans en el bar Stonewall Inn. marcaron un punto de inflexión en las luchas por los derechos LGBT en Estados Unidos y muchas organizaciones en el mundo celebran el “orgullo gay” ese día.

Las actividades comenzaron a las 3 de la tarde con las palabras de Alberto Roque, coordinador del grupo Hombres por la Diversidad, quien hizo un recuento de lo acontecido el 28 de junio de 1969 y la repercusión en las luchas del movimiento homosexual norteamericano y del mundo (leer sus palabras más abajo).

A continuación se presentó la película "Milk" (EE.UU., 2008, Dir. Gus Van Sant, 128’), que tuvo un intenso debate posterior, con la participación de la Directora del CENESEX Mariela Castro, en el que se profundizó sobre el desarrollo de las luchas de los movimientos LGBT en Estados Unidos y en el trabajo que se realiza en Cuba para eliminar todas las discriminaciones, incluyendo las que se hacen por motivo de la orientación sexual y la identidad de género de las personas.

Tras este análisis, se presentaron dos capítulos de la serie de animados "Pubertad", un trabajo conjunto del CENESEX con el ICAIC, dirigido a la población más joven con fines educativos en temas de sexualidad. Los trabajos presentados fueron "Me gustas tú", que recientemente recibió el Prix Jeunese Iberoamericano en Sao Paulo, y "Tia Chela", que trata magistralmente el tema de la diversidad sexual. Los realizadores de la serie que estaban presentes: Aramís Acosta, productor; José Martín Díaz, guionista; y Mariela Castro, asesora y quien aportó la idea original, con su libro "¿Qué nos pasa en la pubertad?", explicaron detalles de la serie y el impacto positivo que ha tenido tanto en la población joven cubana como en los eventos internacionales en que ha participado.

La tarde terminó con la presentación del libro "Aires en la memoria", con la autora Daysi Rubiera, que narra la historia de vida de numerosas personas en el municipio habanero de Regla y que fuera reseñado por Mariela Castro como un vivo ejemplo de la variada diversidad de la población cubana; y un espectáculo de transformistas, en el que también los representantes de las redes sociales del CENESEX compartieron con Imperio y Margot explicando el trabajo de sus grupos.

Más fotos en: http://www.cenesex.sld.cu/webs/diversidad/stonewall.html


Stonewall, su legado histórico
Por: Alberto Roque Guerra

El 28 de junio de 1969 ha sido considerado mundialmente como un día histórico en la lucha por el reconocimiento de los derechos de lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros.

El bar Stonewall Inn., ubicado en la calle Christopher del Greenwich Village de la Ciudad de Nueva York,  fue el epicentro de una de una enconada protesta de jóvenes homosexuales y transgéneros contra la represión policial.  Una mirada a este hecho desde nuestros días nos permite apreciar su justo significado en el largo proceso de estas luchas en el mundo, que comenzaron con acciones individuales a finales del siglo XIX y continúan vigentes en la actualidad.

El lugar de los hechos y su tradición de resistencia

Greenwich Village se caracterizó desde su fundación por ser un barrio bohemio y rebelde. En tiempos de dominación holandesa, cuando Nueva York era Nuevo Ámsterdam, los primeros habitantes de la villa se enfrentaron violentamente a las autoridades, en contra de la transformación del trazado de sus calles que permitiera el tráfico de carruajes que invadían poco a poco la ciudad.

Hacia la segunda mitad de los años 60, la calle Christopher llegó a ser un sitio tan frecuentado por personas gay que muchos creían que Gay Street, nombre de una calle ubicada en ese barrio, obedecía a este motivo. Sin embargo, el origen del nombre provenía de 1834,  cuando Sydney Howard Gay lideró con éxito una protesta contra la instalación de la infraestructura para trenes elevados en la ciudad.

Stonewall era un negocio de la mafia neoyorkina. El espacio devino casa del té durante la Ley seca y la afluencia de artistas, intelectuales y hombres gays le hizo ganar notoriedad, hasta convertirse en el restaurante Bonnie´s StoneWall Inn en los años 40.

Homofobia a la American way.

En 1967 Stonewall Inn. devino bar gay, década en que se produjeron dinámicos cambios sociales y políticos en los Estados Unidos. Los sesenta significaron el renacer del movimiento de las mujeres, la revolución sexual y la expansión del movimiento por los derechos civiles y contra la guerra de Vietnam.

En ese contexto las personas gays, lesbianas y transgéneros eran víctimas de una profunda discriminación y una cruel persecución policial. Las leyes que penalizaban la homosexualidad y las prácticas de terapias reparativas por la medicina eran la norma.

David Carter (2004) en su libro “Stonewall, las protestas que encendieron la revolución gay” manifiesta que, en 1961 las leyes que penalizaban la homosexualidad en Estados Unidos eran más duras que las aplicadas en Cuba, Rusia o Alemania del Este, países usualmente criticados por el gobierno estadounidense por sus “métodos despóticos” (1)

En tiempos de la administración de Eisenhower, la Orden Ejecutiva 10450 consideraba a la perversión sexual como causa de investigación gubernamental y de despidos. El Macartismo estimuló el endurecimiento de las leyes contra la homosexualidad y los puritanos de la extrema derecha centraban sus histéricos ataques hacia el abuso infantil como vicio de la homosexualidad.

El espectro del estigma se ampliaba en consecuencia a otras cualidades negativas relacionadas con la ideología, llegando a relacionar la homosexualidad con el comunismo.

La aplicación de electroshocks, terapia farmacológica, castración y lobotomías en Clínicas de Internamiento Psiquiátrico estaban amparados por el delito de sodomía consensual en la ley de 1941 en muchos estados de la unión.

La persecución policial hacia las personas gays y transgéneros estaba a la orden del día. Los bares gays y los sitios de encuentro público eran objeto de redadas policiales. Hacia 1966, alrededor de 100 hombres gays eran arrestados cada semana por solicitar sexo homosexual. El cuerpo de policía de Nueva York tenía la orden de arrestar a toda persona que usara al menos tres prendas de vestuario que no fuese apropiado para su sexo.

Resistencia y activismo político

Aun cuando los sucesos de Stonewall se han universalizado como el nacimiento del Movimiento de Liberación Homosexual, y se ha reconocido como la fecha que conmemora el orgullo gay, el movimiento de resistencia por los derechos de las personas homosexuales había comenzado desde hacía buen tiempo.

En 1950 se funda en la ciudad de Los Ángeles la Sociedad Mattachine. Su fundador, Harry Hay, era miembro del Partido Comunista de los Estados Unidos. La mencionada sociedad se autodenominó movimiento homófilo y en muy poco tiempo tuvo alcance nacional. Sus objetivos se centraban en cohesionar a las personas gays, educarlas y pasar posteriormente a las acciones políticas.

Sus miembros consideraban que podían eliminar la discriminación y el prejuicio hacia las personas homosexuales mediante la educación sobre la homosexualidad en términos exactos y científicos. Lo anterior chocaba con la percepción de la población y muchos de los argumentos que se esgrimían en las campañas educativas eran aportados por la Psiquiatría y la Psicología, los supuestos expertos sobre homosexualidad. Los nuevos líderes consideraron que el movimiento había perdido su visión política.

Es justo reconocer que los primeros intentos de legitimar a nivel internacional a las personas homosexuales, proviene desde los inicios mismos del uso del término homosexual. El escritor austro-húngaro Karl Maria Kertbeny, fue quien usó el término por primera vez en 1869, y la consideraba como una condición innata al ser humano. Sostenía que las leyes que penalizaban la homosexualidad eran contrarias a los derechos del hombre y que los actos sexuales privados libremente consentidos no debían tener relevancia penal.

 Afínales del siglo XIX, el alemán Magnus Hirschfeld fue aún más lejos, al crear un grupo de activismo por los derechos de los homosexuales y abogar por la disolución de la ley 175 que condenaba la homosexualidad en el Código Penal alemán. También fue un destacado investigador en Sexología a quien el fascismo truncó su carrera y su activismo político.

Frente de Liberación Homosexual: la chispa de Stonewall

La persecución y acoso policial en Christopher Street desencadenó una violenta protesta frente al Bar Stonewall. Durante tres noches, gays y transgéneros resistieron la fuerte represión de la policía neoyorquina. Los colectivos homosexuales se unieron a los miembros de la Sociedad Mattachine, tomaron las calles de la ciudad y formaron una nueva entidad política: el Frente de Liberación Homosexual (FLH).

El FLH toma su nombre como homenaje al Frente de Liberación Nacional durante la guerra del Estados Unidos en Vietnam. Se autodefinía como un grupo revolucionario. Resulta interesante el fragmento de la siguiente declaración:

Somos un grupo homosexual revolucionario, de hombres y mujeres, con la conciencia de que no se puede lograr una total liberación sexual a menos que se supriman las instituciones sociales existentes. Rechazamos los intentos de la sociedad de imponernos roles sexuales y definiciones a nuestra naturaleza (…) Nos identificamos con todos los oprimidos: la lucha del pueblo vietnamita, de los negros, los trabajadores (…) con todos aquellos que son oprimidos por esta podrida, sucia, vil y jodida conspiración capitalista.

Lamentablemente, el frente vio frustrado sus objetivos fundacionales, que fueron revindicados con el surgimiento del Sida a comienzo de la década de los 80. La adquisición de poder económico de los hombres gay y la exclusión de las lesbianas  de las lesbianas feministas radicales y de las personas trans fragmentaron el movimiento. Las marchas por el Orgullo gay perdieron su significado político, contaminadas por intereses comerciales.

Lo anterior conllevó al surgimiento de otro frente de resistencia a comienzos de la  década de 1990: el movimiento Queer. Pero ese sería tema para otro artículo.

Para las y los activistas de las redes sociales del CENESEX, para toda aquella persona que realice activismo de manera individual, así como a la población en general, es fundamental conocer el legado histórico de Stonewall y del movimiento internacional por los derechos de las personas LGBT. Trabajemos de conjunto por el reconocimiento de nuestros derechos, con nuestras propias ideas e iniciativas, sin presiones ni interferencias y en apego a nuestra legítima soberanía. (28/06/2011)

Nota:
(1) Carter D. (2004). Stonewall, the riots that sparked the gay revolution, St. Martin´s Griffin, New York, p.16

Bibliografías consultadas:
1. Carter D. (2004). Stonewall, the riots that sparked the gay revolution, St. Martin´s Griffin, New York, p.16
2. Herzer, Jean Claude. «Homosexual Studies and Politics in the 19th Century: Karl Maria Kertbeny .» Journal of Homosexuality 19, nº 1 (1990).
3. James D. Steakley. The Early Homosexual Emancipation Movement in Germany. (1975).
4. John Lauritsen and David Thorstad. The Early Homosexual Rights Movement, 1864-1935. (Second Edition revised).
5. Molly McGarry, Fred Wasswerman. Becoming visible, an illustrated history of lesbian and gay life in twenty century America. Nueva York: Penguin Studio, The New York Public Library, 1998
6. Manfred Herzer, Kertbeny and the nameless love, Journal of homosexuality, XII 1985, fascicolo 1, pp. 1-26.

 

      Sección Diversidad Sexual
     Centro Nacional de Educación Sexual
            CENESEX    -    Cuba

 

6/17/2011

Día Histórico en Naciones Unidas: Consejo de Derechos Humanos Aprueba Resolución sobre Orientación Sexual e Identidad de Género

Cuba vota a favor de la resolución, en consonancia con la voluntad política de nuestro Partido de eliminar todas las formas vigentes de discriminación en nuestra sociedad.

La Habana, 17 de junio 2011. En un histórico voto que valida los principios de igualdad y no discriminación, contenidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Consejo de Derechos Humanos en Ginebra ha aprobado una resolución sobre la violación de los derechos humanos por orientación sexual e identidad de género (L9/Rev. 1).  
La resolución fue presentada por Sudáfrica con 39 estados copatrocinadores  y contó con el voto a favor de 23 países, 19 votaron en contra y 3 se abstuvieron. Durante la presentación, Sudáfrica manifestó: "todas las personas tienen derecho al disfrute de sus libertades y derechos sin distinción de ningún tipo". La delegación de la hermana República del Brasil pidió al Consejo "abrir las puertas, cerradas por demasiado tiempo,  al diálogo".  
La resolución reafirma la universabilidad de los derechos humanos y señala la preocupación por los actos de violencia y de discriminación basados en la orientación sexual e identidad de género. Su texto propone al alto comisionado de derechos humanos un estudio que documente las legislaciones y prácticas discriminatorias, así como los actos de violencia contra las personas, basados en su orientación sexual e identidad de género, en todas las regiones del planeta. También incluye un panel de discusión para la 19na sesión del Consejo de Derechos Humanos, donde se dialogará de forma transparente y constructiva sobre los resultados del mencionado estudio, que deberá concluir en diciembre del presente año. El texto de la resolución también dispone que el mencionado panel determinará sobre el seguimiento futuro de este tema. 
El voto favorable de Cuba es muestra de la voluntad política de nuestro Partido  y Estado en eliminar todas las formas de discriminación que lamentablemente aún persisten en la sociedad cubana. Se considera un avance en la inclusión en las políticas sociales de nuestro país de todos los aspectos relacionados con la orientación sexual e identidad de género, así como considerar a todos los derechos sexuales como derechos humanos. (HxD, CENESEX, Diversidad Sexual SOCUMES) 

Estados que apoyaron la resolución  (los miembros de la CDH están subrayados):
Albania, Andorra, Argentina, Armenia, Australia, Austria, Bélgica, Bolivia, Bosnia-Herzegovina, Brasil, Bulgaria, Canadá, República Centroafricana, Chile, Colombia, Costa Rica, Croacia, Cuba, Chipre, República Checa, Dinamarca, Dominica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Estonia, Fiji, Finlandia, Francia, Georgia, Alemania, Grecia, Guatemala, Honduras, Hungría, Islandia, Irlanda, Israel, Italia, Japón , Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Malta, Islas Marshall, México, Micronesia, Mónaco, Mongolia, Montenegro, Nauru, Nepal, Países Bajos, Nueva Zelanda, Nicaragua, Noruega, Palau, Panamá, Paraguay, Polonia, Portugal, Rumania, Rwanda , Samoa, San Marino, Serbia, Seychelles, Sierra Leona, Eslovaquia, Eslovenia, Sudáfrica, Corea del Sur, España, Suecia, Suiza, Tailandia, Timor-Leste, Tuvalu, Ucrania, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, Estados Unidos de América, Uruguay, Vanuatu, Venezuela, y la Antigua República Yugoslava de Macedonia.

6/06/2011

Hombre transexual cubano de 61 años cumple su sueño de reasignarse y cambiar DNI

 

Juani Santos se operó a principios de este año y logró cambiar su nombre en el carnet de identidad.

 

EFE-. A sus 61 años, Juani Santos ha cumplido el sueño de ser un hombre "normal" tras convertirse en uno de los transexuales pioneros de las cirugías de cambio de sexo en Cuba, aprobadas por el Gobierno de Raúl Castro en junio de 2008.

De constitución pequeña y bigote, Santos explicó en entrevista con EFE que fue operado a inicios de este año y es uno de los dos transexuales cubanos que han cambiado su sexo de mujer a hombre mediante las operaciones promovidas por el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex).

"Fue lo que toda mi vida anhelé, era lo que necesitaba como persona. No hay nada más maravilloso que poder identificarme como un hombre normal porque yo soy un hombre heterosexual", dijo Santos, quien nació y vivió durante décadas con el nombre de Juana en la provincia de Matanzas.

En realidad, Santos se las ingenió para ocultar y modificar ese nombre por el de Juani con la misma entereza con que rompió todos los vestidos que su madre intentó que usara y afrontó las burlas por su condición de transexual.

"Yo me he considerado siempre, desde que nací, un varón. Nunca me creí un homosexual. Mucha gente pensaba que sí lo era y eso me ofendía", relata. Según recuerda, pasó su infancia adorando a su padre, vistiendo pantalones y jugando sin camisa y sin zapatos con los chicos del barrio en plena calle.

Abandonó la escuela en quinto grado, cuando le exigieron usar uniforme femenino, y de adulto continuó sus estudios gracias al apoyo de un jefe que convenció a los maestros para que lo incluyeran en las listas como "Juani" y sepultaran su nombre de pila."Hubiera querido ser ingeniero, pintor, restaurador. Pero mi nombre me dificultó mucho las cosas", indica Santos, quien trabaja en una fábrica de metales de Matanzas desde 1970.

Ese año marcó en Cuba el inicio del periodo conocido como "quinquenio gris" por la "caza de brujas" contra intelectuales y artistas acusados de homosexualidad o "desviacionismo ideológico" y que recrudeció la homofobia en el país.Al narrar su vida, Santos intenta omitir los sinsabores y se centra en quienes lo han querido y ayudado, desde su familia y compañeros hasta Mariela Castro, directora del Cenesex e hija de Raúl Castro.

Santos viajó en 2009 junto a Mariela Castro a Copenhague para representar a Cuba en la Conferencia Internacional LGTB (gays, lesbianas, bisexuales y transexuales) sobre Derechos Humanos, y asegura que en 2004 la especialista le prometió que lograría su cirugía de cambio de sexo.Y así sucedió. Hace tres años, el Gobierno aprobó una resolución para permitir esas operaciones, donde solo existía el precedente de una cirugía de hombre a mujer en 1988.

En 2008 se divulgó que unos 30 transexuales podrían ser beneficiados con el procedimiento gratuito, en caso de desearlo, y ese mismo año comenzaron las cirugías de masculinización y feminización, previas a las de modificación sexual, a cargo de un equipo asesorado por especialistas belgas.Mariela Castro dijo a la prensa en 2010 que ya se habían realizado unas 15 cirugías, a pesar de su política expresa de no divulgar los costos ni la cifra exacta de operados hasta llegar a la meta de 30.

 

Leal a esa estrategia, Juani Santos no da más detalles sobre su operación, solo precisa que fue a inicios de este año en La Habana y que aún le faltan otras "más sencillas".La cronología de su transformación comenzó en 1978 con una primera operación para reducir pecho, y una década después vivió un importante cambio cuando el Cenesex facilitó que le modificaran el nombre de pila en su documento de identidad.

 

"Con el cambio de nombre recuperé a parte de mi familia. Fue un alivio", resalta Santos, quien ve a su hermano mayor de 67 años, Fernando, como un ejemplo de lo que sucedió.nFernando llegó a pensar que la actitud de Juani era una "aberración" y en su infancia le prohibió usar pantalones y quemó todos los que guardaba en el guardarropa. Pero en los últimos tiempos es él quien ha acompañado a Juani en el tratamientos y cirugías y habla con la prensa con el mismo valor que lo hace su hermano.

 

"Para nosotros, la mujer a la que él sustituyó, murió. Cuando alguien a quien conocemos desde hace años nos pregunta por ella, decimos que falleció, porque murió espiritualmente", explica a EFE Fernando. Santos solo lamenta que en Cuba no se apoye más el "maravilloso" trabajo que ahora lidera Mariela Castro y espera que las reformas legales que intenta a favor de los derechos de los homosexuales y transexuales se concreten pronto, para que otros no sufran lo mismo que él.

6/02/2011

Cuba contra la homofobia

Tomado de: Centro Latinoamericano de Sexualidad y Derechos Humanos

Por Leonardo Bastida Aguilar

Este mayo Cuba se ha manifestado nuevamente contra la homofobia. En diversos puntos de la isla, paneles sobre educación sexual, derechos de las personas LGBT, despatologización de las identidades trans y prevención del VIH-Sida reavivaron el debate en la Universidad de La Habana y la Universidad de Oriente. Presentaciones de libros, como la antología de cuentos homoeróticos Instrucciones para cruzar el espejo, comparsas, festivales musicales y puestas en escena hicieron visibles las prácticas artísticas y culturales de lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros cubanos.

Las actividades, celebradas principalmente en La Habana y Santiago, contaron con la participación de representantes del gobierno, como el Jefe del Departamento Ideológico del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, Rolando Alfonso Borges; reconocidos personajes del ámbito artístico, entre ellos Miguel Barnet, Presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC); e invitados extranjeros, como la Diputada alemana por el Partido de la Izquierda, Barbara Holl, y Wilfred Labiosa, dirigente de la organización estadounidense Boston Pride.

El marco que articuló estos eventos fue la IV Jornada Cubana contra la Homofobia, iniciativa educativa liderada por el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), su directora Mariela Castro, y colectivos de la diversidad sexual, con el fin de combatir la homofobia y visibilizar la situación de las personas LGBT en la isla. Un punto alto de las celebraciones, recogido por medios internacionales, fue la Marcha Contra la Homofobia, realizada el 14 de mayo.

Alberto Roque, coordinador del grupo Hombres por la Diversidad del CENESEX, habló con el CLAM sobre estas actividades, la apertura del gobierno al tema de la diversidad sexual y las principales reivindicaciones de las organizaciones LGBT cubanas.

¿Cuál es la importancia de realizar jornadas contra la homofobia en Cuba?

La realización de la Jornada Cubana contra la Homofobia forma parte de una iniciativa educativa más amplia, que dura todo el año y es liderada por el Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), junto a otras instituciones y organizaciones, grupos en el exterior solidarios con la Revolución Cubana, así como la colaboración de organismos de las Naciones Unidas y de algunas representaciones diplomáticas radicadas en nuestro país.

Desde la primera conmemoración del Día Internacional contra la Homofobia en Cuba, el 17 de mayo de 2007, con el cine debate del filme estadounidense “Boys don´t Cry”, decidimos enfocar nuestro trabajo educativo y de activismo social en señalar la homofobia como el problema y al mismo tiempo se visibiliza un sector de la sociedad discriminado y marginado, como lo son las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros.

Paulatinamente también hemos llamado la atención sobre los mecanismos que articulan transversalmente todas las discriminaciones, por lo que al reflexionar sobre la homofobia, se hace extensivo hacia la discriminación por género, color de la piel, origen geográfico, entre otras.

Notamos con satisfacción que las y los activistas y más recientemente en los medios de comunicación, se comienza a enfocar estas iniciativas desde el reconocimiento de los derechos sexuales como derechos humanos.

¿Qué tan simbólico es el hecho de que una compañía de hombres vestidos de mujer haya tenido un evento en el Teatro Karl Marx?

Más que simbólico, es el resultado concreto de la Estrategia Educativa por el Respeto a la Libre Orientación Sexual e Identidad de Género. Hemos logrado alianzas con diferentes decisores políticos y gubernamentales. En el contexto actual que vive la nación, el Partido Comunista de Cuba ha dado un espaldarazo público y claro a nuestro trabajo. Este apoyo lo tuvimos desde la primera jornada en 2008, pero el diálogo y el intercambio se han articulado de forma más expedita y sistemática.

Nuestros transformistas y también la actuación de mujeres transexuales y artistas profesionales ya habían ganado espacios en grandes escenarios, con un trabajo digno de encomio. Sin embargo, creo que lo más destacable fue la profesionalidad y la diversidad de todo el espectáculo.


¿Cómo fue posible para los miembros de la comunidad de la diversidad sexual cubana lograr que un gobierno que durante muchos años se dedicó a perseguirlos, hoy en día apoyé estas actividades?

La diversidad sexual involucra a todas y todos, incluyendo las personas heterosexuales. En Cuba, como en cualquier país de la región y también del mundo se persiguieron y excluyeron a las personas que expresaran identidades sexuales no heteronormativas.  Los años 60, 70 y hasta bien entrados los 80 del pasado siglo, estuvieron matizados por la patologización de la homosexualidad.

En Cuba se cometieron injusticias y se institucionalizó la homofobia durante esos años. Ese es un pesado fardo histórico que llevamos y que siempre nos los recuerdan con una deliberada y discriminatoria selectividad política,  sin embargo no se cometieron asesinatos de homosexuales por el estado ni por grupos paramilitares. Lamentablemente esa continúa siendo la triste realidad de otros países de la región en nuestros tiempos.

Nuestro pueblo y nuestros gobernantes, procedentes de ese mismo pueblo, hemos modificando favorablemente nuestra percepción sobre las también llamadas sexualidades marginales. Considero que han contribuido la  despenalización total de la homosexualidad desde 1997, la creciente – pero insuficiente aún- educación sexual de las cubanas y cubanos, la despatologización de la homosexualidad, la dinámica asimilación de los cambios culturales por el pueblo cubano, la incidencia política y las iniciativas educativas desde el Centro Nacional de Educación Sexual, liderada por Mariela Castro, además del encomiable trabajo del Centro de Prevención de la ITS VIH Sida hacia la población de hombres que tienen sexo con hombres desde el año 2000.

Sin dudas las Jornadas han dado la oportunidad de visualizar nacientes liderazgos de las y los activistas involucrados en la lucha por el reconocimiento de los derechos LGBT, muchos de ellos son personas heterosexuales conscientes de la injusticia que implica las relaciones hegemónicas y de poder entre los seres humanos.

¿Qué tanta homofobia pervive en la Cuba actual?

La homofobia en Cuba es proporcional a la pobre erosión del poder patriarcal. Percibo mucha violencia verbal, también se expresa mediante violencia física, aunque no son estadísticamente preocupantes los crímenes de odio basados en orientación sexual e identidad de género.

Aun convivimos con la negación de derechos en la esfera laboral, en los cuerpos armados, en el no reconocimiento de las trans identidades y sobre todo con el silencio, que es en mi opinión el más difícil de desarticular. Ese silencio hace también cómplice a las víctimas de la homofobia.

¿Hacia dónde van las demandas de los colectivos lgbttti en Cuba?

En el momento actual abogamos por el reconocimiento de las uniones legales entre personas del mismo sexo, por la no patologización de la transexualidad y por la aprobación del Decreto Ley sobre Identidad de género.

En la esfera educativa buscamos fortalecer el diálogo con el Ministerio de Educación, la formación de policías y juristas como educadores en diversidad sexual, la formación de jóvenes universitarios, así como fortalecer la formación
de activistas con enfoque de derechos humanos.

¿Qué tan factible podría ser para el colectivo pedir uniones entre personas del mismo sexo?

Pedir las uniones entre personas del mismo sexo absolutamente factible, el reto consiste en que sea  debatido y aprobado por el Parlamento cubano. El reconocimiento de las uniones entre personas del mismo sexo está enmarcado en las modificaciones del Código de Familia, ley civil que regula las relaciones hacia el interior de la familia. 

Para nosotros este sería un derecho humano que debe ser reconocido por nuestro estado, es decir, no  requiere ser plebiscitado. Lo anterior no implica que detengamos nuestras iniciativas educativas, que se mantendrán, aun cuando logremos los cambios legislativos por los que abogamos.


Por lo que entiendo, estas jornadas se realizan en diversas ciudades de Cuba, ¿Qué tan importante es llevar estas jornadas a todo el país?

Consideramos que es importante sumar las iniciativas en todas las provincias posibles, puesto que el objeto social del CENESEX es de alcance nacional. Así lo entiende el Programa Nacional de Educación Sexual. Desde el año pasado hemos comenzado a celebrar las actividades centrales en las capitales de provincia, específicamente cada 17 de mayo.


Además de eventos públicos, ¿Qué otras actividades se llevan a cabo, se da información sobre el tema?

Se realizan conferencias sobre diversidad sexual, estigma y discriminación, paneles sobre el reflejo de los temas de la sexualidad en los medios de comunicación, sobre las bases de la Teoría Queer, etc...

El cine club Diferente ha devenido un espacio permanente cada mes, desde la celebración de la Primera Jornada Cubana contra la Homofobia.  Las artes plásticas también se  han sumado a las Jornadas con exposiciones fotográficas y de pinturas donde se aborda la temática de la diversidad sexual.

Se realizan acciones de prevención de las ITS-Sida y se lanzan campañas de prevención relacionadas con el tema, entre otras.

 

Matrimonio, Familia y Educación Sexual en Cuba: ¿Y los Otros Modelos?



Por Alberto Roque Guerra
¡Oh, sorpresa! En mi revisión matutina de las noticias del día me encuentro con dos artículos publicados en los diarios más importantes de nuestro país.
En Juventud Rebelde, diario de la Juventud Cubana, aparece el artículo de opinión Educación sexual, ¿asunto familiar?. Confieso que al leer el titular pensé: que bien, ha puesto el dedo en la llaga. Al sumergirme en la lectura noto que su autor, el profesor y pedagogo, Diego de Jesús Alamino, adopta un enfoque acrítico respecto a la educación sexual hacia el interior de la familia cubana, donde hablar de sexualidad continúa siendo un tabú y los padres no cuentan con las herramientas necesarias para brindar información sobre sexualidad basada en los conocimientos científicos. Lamentablemente lo –mal- aprendido sobre sexualidad  en nuestras familias sigue impregnado de estereotipos machistas y patriarcales que debemos a nuestra milenaria herencia cultural y religiosa judeo-cristiana y africana.
En la familia cubana contemporánea se niega el derecho de las niñas y niños, como sujetos de derecho, a ser educados  en los temas de la sexualidad con enfoque de género y con pleno respeto a la diversidad. Se ignora sobre la capacidad progresiva de aprendizaje de las y los infantes sobre sexualidad. En consecuencia se perpetúan las acciones autoritarias y normalizadoras de los padres al definir desde sus prejuicios y su poder lo que sus hijas e hijos deben o no saber sobre sexualidad, como si la rica y diversa realidad circundante no tuviera influencia alguna sobre la personalidad de cada ser humano.
El artículo tampoco profundiza en el papel de la educación escolar y sobre las resistencias que nuestro sistema educativo impone a la aplicación del Programa Nacional de Educación Sexual en todos los niveles de enseñanza de forma transversal, con enfoque de género, basado en los principios de igualdad y no discriminación y más allá de los contenidos biologicistas y positivistas que predominan en la actualidad.
Me alarma leer en
pleno siglo XXI que el autor diga sin ambages que debe respetarse el “valor” de la virginidad para algunas familias cubanas. Esa es simplemente una muestra del pensamiento medieval que perdura en nuestro imaginario y que se acuña como valor. El control del cuerpo de las mujeres y de las sexualidades todas no será jamás un valor mientras se basen en la desigualdad y el estigma entre los seres humanos. No debemos confundir privilegios con derechos.
Preocupa así mismo que el profesor Diego De Jesús, mezcle el tema de la educación sexual con el matrimonio
al mencionar el artículo de la nuestra Constitución donde se establece como “la unión entre hombre y mujer”. Es una pena que no sea más explícito, pero puedo leer entre líneas y noto que dentro de sus valores personalísimos solamente tiene cabida y legitimidad la educación sexual en el contexto de las familias heteroparentales reconocidas legalmente por el Estado y algunas Iglesias. Esa realidad se subvierte ante nuestras narices con otros modelos de familias también válidos: monoparentales, homoparentales y muchas otras variantes, ejemplo: cuando educa un tío, un amigo, uno o dos abuelos sin contar las uniones consensuales (no legalmente registradas) en muchas de sus variantes.
Si esta es la lógica que sigue una aparente mayoría desde el control social, se viola entonces el artículo constitucional que proclama que las cubanas y cubanos nacemos con derechos, somos iguales y no podemos ser discriminados por ningún motivo. Me atrevo a decir que en este aspecto, nuestra Constitución no es representativa de grupo de cubanas y cubanos bastante numeroso y debe, por lo tanto, se modificada.
Sin dudas, este artículo tiene vasos comunicantes intencionales y muy nítidos con  este otro:
Matrimonio: Protección Jurídica, publicado también hoy en Granma, órgano oficial del Partido Comunista de Cuba.Para avalar el contenido de su artículo,  Ricardo Alonso Venereo cita  a la doctora Olga Mesa Castillo, presidenta de la Sociedad Cubana de Derecho Civil y de Familia de la Unión Nacional de Juristas de Cuba, quien en su charla con el autor,se refirió a la garantía de los derechos económicos y patrimoniales bajo el matrimonio  así como a las potencialidades de desprotección de la prole y del derecho a la biparentalidad por las características de “liberalidad” de las uniones consensuales.
Con el mayor respeto y admiración que profeso por la Dra. Mesa, sin dudas una institución en Cuba sobre Derecho de Familia, considero que su opinión explica claramente la única garantía que ofrece el matrimonio en Cuba: la patrimonial;  de hecho en ocasiones digo medio en serio, medio en broma, que esa institución con fuertes orígenes religiosos debiera llamarse Patrimonio. Sin dudas, lo anterior es cuestionable, puesto que para las parejas consensuales basta con testigos que muestren evidencias de una unión estable para dar curso  a la reclamación de los bienes patrimoniales adquiridos durante la relación de pareja. Si de protección de la descendencia se trata, la ley cubana es clara en la protección de los derechos de las niñas y niños,  independientemente que se trate de matrimonio, unión consensual u otro modelo de parentalidad o maternidad.
Contrasta el contenido del artículo con el silencio ante la creciente necesidad de legitimar legalmente otros modelos de familia, dentro de ellas las fundadas por parejas del mismo sexo, tema también tratado en la  IV Conferencia Internacional de Derecho de Familia, celebrado el pasado abril en La Habana y donde la propia Dra. Mesa abogaba por la discusión y aprobación de las modificaciones del Código de Familia.
Alonso Venereo también exorciza otros de sus fantasmas al referirse al  incremento en un 4.6% del índice de uniones consensuales en Cuba. El autor, va más lejos y concluye con el siguiente párrafo:
Es necesario detener la crisis actual del matrimonio en nuestro país. Hay que educar en la importancia y el sentido de esta unión legal para que las parejas se casen, aun cuando la tendencia universal vaya en sentido contrario. La familia basada en el matrimonio ofrece seguridad, fortaleza y unión. (El destaque es mío)
El autor mira nuevamente a la punta de las ramas al referirse a una supuesta crisis del matrimonio en Cuba y parece no advertir que la verdadera crisis es de valores en las relaciones humanas, hacia el interior de la familia y en la sociedad toda. ¿Cuál es la evidencia científica que avala su afirmación? ¿Cuál es su referente en Cuba de que otros modelos de familia no son válidos o legítimos? Su discurso me recuerda a las posiciones  adoptadas por la falange franquista - católica del Partido Popular cuando se aprobó el matrimonio entre personas del mismo sexo en España.

No me sorprende que no mencione en ningún momento la palabra amor, quizás por manida o cursi, pero tan necesaria en estos tiempos. También agregaría yo: comprensión, comunicación, empatía, igualdad, respeto, solidaridad y cultura de paz. Sin estos valores jamás habrá seguridad, fortaleza ni unión. Si se le llama matrimonio a las múltiples y legítimas familias basadas en estos principios, bienvenido sea, al igual que el resto de los modelos. (2/06/2011)