12/21/2011

Más de lo Mismo

Por: Alain Darcout Rodríguez, Cienfuegos. (psicologo@palacio.cfg.sld.cu ), sobre opinión en Cubasí

 

Para mí Manuel no es más que una simple expresión del poder patriarcal: hombre, blanco, heterosexual, que escaló hasta una de las posiciones más claras del ejercicio de perpetuación de la cultura machista, occidental de base judeo-cristiana, por ello seguramente también acomodado. Ser fiscal provincial le permitía juzgar, tener voz y reprimir todo lo que trasgrediera, desde sus propias concepciones y utilizando la legalidad de su época, el poder entronizado. Manuel, como otros muchos anclados en el pasado, representa los estertores de un régimen hegemónico de discriminación sistemática surgido desde fines de la comunidad primitiva con la división del trabajo según el sexo, y también por la riqueza, y el color de la piel, y la religión, y todo cuando pueda dividir a los seres humanos. Todas parientes: sexismo, racismo, fascismo, xenofobia, homofobia…

¿Recordará de sus tiempos de fiscal o de estudiante de derecho lo que dice el Capítulo VI de la Constitución de la República de Cuba especialmente sus artículos 41, 42 y 43?

La humanidad transitó por miles de años como si ningún individuo con sexualidades no heterosexuales se destacara por su realización social, cultural, política o científica, la identidad sexual de diversas figuras prominentes aún se susurra  como dato curioso en la historia, o es objeto de escándalo y manipulación; otras veces se ocultan imperdonablemente, por solo citar un ejemplo ¿conocemos el papel jugado por los homosexuales durante el nazismo, cuántas vidas se salvaron por sus redes de apoyo, cuanto aportaron al servicio secreto de los aliados?. Por cierto, fueron precisamente los fascistas quienes acuñaron la expresión de “lacras sociales que era preciso erradicar para proteger al pueblo de la degeneración” al calificar a los homosexuales.

La virilidad del cubano enaltecida incluso desde antes de los mambises destacaba cualidades como la fuerza, entereza, valor, pujanza, firmeza, valentía, etc., etc., de todo un pueblo en el enfrentamiento al sádico poder colonial que utilizó hasta tácticas de campos de concentración y a la penetración norteamericana después, desmoralizante; lo viril sin dudas no hacia alusión un falo gigante en perenne erección como a muchos les gusta pensar, consecuencias de los preceptos de género inculcados desde fuera, por ese mejunje que somos, no ciertamente según las expresiones y prácticas de nuestros aborígenes exterminados, a vista de los conquistadores como mansos, débiles, perversos, amorales, incivilizados…

Los jóvenes rebeldes que tras inmensos sacrificios de nuestro pueblo conquistaron el poder en 1959 derrotando al sátrapa, no podían sustraerse de la herencia cultural y el contexto: una historia escrita por hombres blancos, heterosexuales, ricos, en el poder, que silenciaron el papel de las mujeres, de los negros, y de las personas con sexualidades divergentes tratando de borrarlos de la historia, ayudados no solo por el catolicismo español sino también por el evangelismo conservador norteamericano. Tal vez solo Martí, nuestro apóstol, con su genialidad se pueda exceptuar de tal encomio distorsionador de nuestra cultura.

Quienes tomaron el poder en 1959 tampoco podían conocer la nueva política y ética sexual soviética impulsada por el propio Lenin al triunfo de los soviets en 1917, quien según refirió Clara Zetkin en su libro “De los recuerdos de Lenin” llegó a decir “estimo que la famosa teoría del vaso del agua no tiene nada de marxista, y además es antisocial”, esa teoría revisionista tan vieja ya como el marxismo, es precisamente el fundamento de los argumentos que pretenden confinar las expresiones de las sexualidades no heterosexuales puertas adentro; en “La Revolución Sexual en Rusia” documento publicado en 1923 por el Instituto de Higiene Social de Moscú se puede confirmar esta posición de avanzada:

“En lo concerniente a la homosexualidad, sodomía y otras formas de gratificación sexual, las cuales aparecen en las leyes europeas como ofensa a la moral pública, la legislación soviética trata eso como algo natural.”

Fue Stalin como parte de su teoría de la agudización de la lucha de clases para justificar su política de represión masiva, de donde los regímenes socialistas heredaron el epíteto de totalitarios, quien derogó en marzo de 1934 la legislación humanista bolchevique en materia de sexualidad, sumando a la purga antisocialista a los homosexuales; también convirtió a la ciencia en una sierva de su política de burocracia estatal y partidista, llegando a afirmar que no hacían falta las ciencias sociales si existía el marxismo, reduciéndolo a fórmulas absolutas y de manuales, un nuevo tipo de escolástica, que criminalizó otra vez las sexualidades no heteronormativas.

Y no fue hasta 1973 que la homosexualidad fue por primera vez dejada de ser considerada una enfermedad por la Sociedad (norte)Americana de Psiquiatría, ciertamente bajo la presión de los movimientos sociales por los derechos civiles, pero debieron transcurrir 17 años de investigaciones médicas, endocrinológicas, psicológicas, psiquiátricas, antropológicas (donde también participaron cubanos) para demostrar a la comunidad científica internacional que no existe ningún tipo de diferenciación entre los individuos homosexuales y los que no lo son, que las personas homosexuales son endocrinológicamente indistinguibles de las heterosexuales, que ambos se caracterizan por multiplicidad de diferencias biológicas, del intelecto y el carácter, y que son las actitudes, no del homosexual, sino de las demás personas hacia esta condición, las que crean una situación que puede tener un efecto profundo en el desarrollo de la personalidad que impide la integración efectiva en la comunidad. Por todo ello el 17 de Mayo de 1990 la Organización Mundial de la Salud desclasificó a la homosexualidad como una patología y se considera el Día Mundial contra la Homofobia.

¡Supongo que la opinión y experiencia como fiscal de Manuel son más válidas que las de toda la comunidad científica internacional!

La Revolución cubana se ha distinguido por ser fiel a sus principios humanistas y de justicia social, por el respeto irrestricto de los derechos humanos; a pesar de los errores que se cometieron especialmente con este grupo social: la parametración, las UMAP, fruto del estado de las ciencias en la época, la visión pedagógica y criminológica dominante en el mundo, no solo socialista, y sus propios prejuicios machistas; sin embargo, la revolución y sus líderes, han tenido una evolución positiva en el tema a partir de la comprensión de esta realidad y de la descollante labor de Vilma, cual quijote contra los molinos. Increíblemente nuestra prensa lo ha callado y nuestro pueblo noble e inteligente lo desconoce. El silencio también es homofobia.

Ni siquiera fue Mariela Castro Espín, ni el CENESEX quienes iniciaron esta revolución dentro de la revolución, fue Vilma desde la FMC y el profesor de profesores Dr Celestino Álvarez Lajonchere, entonces director del grupo de trabajo que diera origen posteriormente al mismo centro que ahora dirige Mariela. Vilma Espín Guillois, en su condición de miembro del Buró Político del Comité Central del PCC, le solicita EN FEBRERO DE 1986 !!! al  Dr Álvarez Lajonchere la redacción de un documento para ser presentado a la máxima instancia política del país cuyo título es La Homosexualidad: datos y consideraciones para la elaboración de lineamientos de trabajo. Su contenido muestra el interés de la FMC y el GNTES por abordar la problemática de la homosexualidad en la sociedad cubana, y proporcionar a los decisores los aspectos teóricos de la homosexualidad, con las evidencias científicas de su tiempo, y su valor fundamental estriba en apelar a la aplicación de políticas que protejan a estas personas, que sufren de discriminación por su orientación sexual tal como sigue:

“Nuestro gobierno –la dirección política, partidista o estatal- no ha definido una política para orientar en forma clara el tratamiento de la homosexualismo. Si en los primeros años era razonable que diéramos prioridad a otros aspectos del Plan de Educación Sexual, casi diez años después, el mismo argumento pierde fuerza. (…) El proceso de asimilación de estos criterios (sobre la homosexualidad) no será tarea fácil para nadie, como no lo fue para nosotros mismos, pero no hay alternativas (…) De una sociedad medularmente humanista, como es ya la nuestra, no podía esperarse otra actitud. Nuestro Grupo (el GNTES) no teme a la tarea de desarrollar estos criterios en público”

Y que decir de nuestro Comandante en Jefe, quien en 1960 calificara de “niños fistos” al referirse al visible amaneramiento de algunos individuos, concebidos como raros o desviados, seres sin la virilidad suficiente, al Fidel que en 1992 declaraba a Tomas Borges en “Un grano de maíz”:

“No voy a negar que, en cierto momento, este cosa machista influyó también en un enfoque que se tenía hacia el homosexualismo. Yo personalmente —tú me estás preguntando mi opinión personal—, no sufro de este tipo de fobia contra los homosexuales. Realmente, en mi mente, esto nunca ha estado y jamás he sido partidario, ni he promovido, ni he apoyado políticas contra los homosexuales. Eso correspondió, yo diría, a una etapa determinada y está asociado mucho con esa herencia, con esa cosa del machismo. Trato de tener un argumento más humano y más científico del problema […]”

“No veo la homosexualidad como un fenómeno de degeneración, sino lo veo de otra forma. El enfoque que he tenido es de otro tipo: un enfoque más racional, considerándolo como tendencias y cosas naturales del ser humano que, sencillamente, hay que respetar. Esta es la filosofía con que veo estos problemas. Creo que más bien hay que tener consideración hacia una familia que sufre esas situaciones. Ojalá que las familias mismas tuvieran otra mentalidad, tuvieran otro enfoque cuando ocurre una circunstancia de esa naturaleza. Y soy absolutamente opuesto a toda forma de represión, de desprecio, de menosprecio o discriminación con relación a los homosexuales. Es lo que pienso”.

O al que en “Cien Horas con Fidel, conversaciones con Ignacio Ramonet” en 2006, al referirse al tema dijo:

“Era una cultura, pasaba igual que con las mujeres…habían prejuicios fuertes con relación a las mujeres y los homosexuales” “Yo ahora no voy a defenderme de esas cosas, la parte de responsabilidad que me corresponda la asumo. Ciertamente yo tenía otros conceptos con relación a ese problema… Yo tenía opiniones, y más bien me oponía y me había opuesto siempre a cualquier abuso, a cualquier discriminación, porque en aquella sociedad había muchos prejuicios. Ciertamente los homosexuales eran víctimas de discriminación”. “Debo decirle, además, que había – y hay – destacadísimas personalidades de la cultura, de la literatura, gente famosa, orgullo de este país, que eran y son homosexuales, y han gozado y gozan de mucha consideración y mucho respeto en nuestro país. Así que no hay que pensar en sentimientos generalizados.”

Hasta el gigante que nos sobrecoge en sus declaraciones al periódico La Jornada, de México en Agosto de 2010 cuando decía: “fueron momentos de gran injusticia ¡de gran injusticia! La haya hecho quien sea. Si la hicimos  nosotros, nosotros… Estoy tratando de delimitar mi responsabilidad en todo eso porque, desde luego, personalmente, yo no tengo ese tipo de prejuicios (…) Si alguien es responsable, soy yo”.

Por supuesto que esta responsabilidad no le es atribuible en lo personal, descansa sobre los hombros de todos los que prefieren mantenerse atados a sus prejuicios, los que se aferran al poder heterosexista, los que se niegan a comprender desde posiciones más humanistas que estamos hablando de una elemental cuestión de derechos humanos y justicia social.

Los profesionales y activistas comprometidos por el reconocimiento, protección y respeto de los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgéneros e intersexuales, al mismo tiempo, estamos defendiendo un futuro mejor donde cualquier diferencia sea justamente valorada y respetada lo cual incluye a los propios heterosexuales, para de esta manera contribuir a la igualdad plena de cubanas y cubanos. Y no cejaremos en el empeño.

Recuerdo que en materia de Derecho, el Estado tiene la obligación de garantizar el respeto de los derechos de las minorías, sexuales en este caso, aun a expensas de los privilegios de las mayorías. ¿No es así señor fiscal? ¡Y basta por favor del cuento de la mayoría homofóbica, ya hay varias aproximaciones científicas en toda Cuba que demuestran más bien lo contrario: una tendencia a la comprensión y aceptación de la diversidad sexual!

Dijo Raúl al clausurar el VII período de sesiones de la Asamblea Nacional “sin cambiar la mentalidad no seremos capaces de acometer los cambios necesarios para garantizar la irrevocabilidad del carácter socialista” de cara al perfeccionamiento de nuestra sociedad esto es aplicable a todas sus aristas; 50 años después, la posición científica es otra, y la tendencia político – jurídica internacional (incluso del ALBA) es favorable a la protección legal de la diversidad sexual.

Finalmente, no sé por qué cada vez que observo un ataque personificado a Mariela presiento detrás un ataque a su origen genealógico. Sinceramente, quisiera equivocarme. Lo digo por eso de “evidentemente ella posee un respaldo oficial” como si fuera una conjura a la sombra, y considero que mucha responsabilidad tiene de esto la política informativa de los medios de comunicación masiva por no abordar la problemática sexo-diversa como REALIDAD CUBANA, POLITICA DE ESTADO Y OBJETIVO DEL PCC. ¿Cuantas reuniones, acuerdos, talleres, denuncias, artículos, etc., se publican en los sitios digitales del CENESEX y no encuentran ningún reflejo en la prensa nacional?

Lo demás es más de lo mismo. Ignorancia y/o mala fe.

12/19/2011

Privilegios heterosexistas, fundamentalismos nacionalistas y otros desmanes. [II]

Por: Alberto Roque Guerra

 

Estimado Manuel,

Ya me referí a sus privilegios heterosexistas y a sus fundamentalismos nacionalistas. En esta entrada quiero referirme a otros desmanes…
Causa preocupación que usted haya sido un profesional de derecho y que haya recaído en su persona la alta responsabilidad de ser fiscal. Cita usted sin ambages su experiencia profesional al relacionar la homosexualidad con los delitos sexuales. Imagino que se refiere a la época en que se penalizaba la homosexualidad en Cuba, complicado periodo  de la historia jurídica en nuestro país, puesto que hasta 1979 se penalizaban las relaciones sexuales entre  personas del mismo sexo, basadas en los artículos del Código Social Español de la época colonial.  Sin embargo, se mantuvo a la homosexualidad como delito de escándalo público y se penalizó su ostentación pública desde 1979 hasta 1997. Posteriormente se eliminó toda alusión a la homosexualidad en nuestra legislación y se equipararon las condenas para el abuso sexual infantil independientemente al género de la víctima y el victimario (antes de 1997 la condena era mayor cuando ambos eran del mismo sexo).
En cuanto a éste último acápite, estoy seguro entonces que usted debe haber comprobado que en los casos de abuso sexual infantil, la mayoría ocurre entre personas de diferentes sexos (heterosexuales) y que el papel corruptor de las personas homosexuales sobre la juventud son producto de su subjetividad y de su obsesión de estigmatizar a las personas por su orientación sexual.
Con demasiada frecuencia escuchamos durante estos debates e intercambios  que “todos somos iguales ante la Ley”, pero la realidad vivida por muchas personas lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros demuestra que no siempre somos iguales ante los jueces, los fiscales ni  ante los abogados encargados de la defensa.
Sé que muchas personas dirán que esta es la opinión de Manuel  y nada más, pero no veo en todo lo que dice nada de casual o aislado.  La interpreto como un llamado a trabajar con los operadores del derecho cubano en los temas relacionados con la sexualidad, en lo fundamental con las y los estudiantes que serán nuestros futuros juristas. También es primordial  denunciar cualquier interpretación inadecuada de las leyes y la necesidad urgente de actualizar la legislación cubana en todos los temas concernientes a los derechos humanos relacionados con la orientación sexual y la identidad de género.
Manuel todavía puede aprender lo que no aprendió en la Facultad de Derecho. La homofobia, como todas las discriminaciones, es nociva para su salud mental. Si no desea - o no quiere- aprender también es su derecho, pero deje al menos que la gente viva.

12/18/2011

La homofobia solo tiene un rostro: la deshumanizacion

Dr. Jesús Dueñas Becerra
Psicólogo, crítico y periodista

He decidido compartir con los lectores tres manifestaciones homofóbicas aberrantes que acontecieron en la capital de la antigua provincia de Las Villas (hoy Villa Clara) y las dos últimas en la carpenteriana Ciudad de las Columnas.
Corría la primera década de los setenta (el llamado quinquenio gris en el campo de la cultura cubana), y en la Escuela de Medicina de la Universidad Central de Las Villas (UCLV), el director de ese centro de educación médica superior devino un cazador de homosexuales y tronchó la carrera y el futuro porvenir profesional de chicos y chicas, quienes fueron expulsados/as de la universidad por el pecado original de ser “diferentes” (¿?).
No obstante, la vida se encargó de demostrarle a ese doctor en Medicina (sí, porque médico jamás fue) cuán injusto había sido… hasta con su propio hijo, quien a la sazón estudiaba en una academia militar y fue descubierto haciendo el amor con un compañerito de aula en el baño de dicha institución.
Los dos adolescentes fueron llevados ante el alumnado del plantel, reunido en el matutino, y después de calificarlos con los más ofensivos epítetos delante de oficiales, profesores y demás discípulos, fueron dados de baja deshonrosamente de la escuela, porque eran homosexuales, y en esa oscura época socio-histórica, la homosexualidad se consideraba una manifestación ideológica contraria a los principios de la revolución socialista (¿?).
El progenitor del ex Camilito fue notificado de inmediato del crimen contra natura en que había incurrido su retoño y la reacción inmediata fue botarlo de la casa y decirle que allí no podía estar ni un segundo más, porque manchaba su imagen como revolucionario y como militante del Partido Comunista de Cuba (PCC).
No obstante, la madre del joven, quien fue más madre que mujer, le contestó: “quien tiene que irse ahora mismo de aquí eres tú y no él, porque es mi hijo, y sea como sea, piense como piense, sienta como sienta, lo tuve nueve meses en el vientre, y no voy a renunciar —como has hecho tú— a ser su madre, sobre todo ahora que es cuando más necesita mi amor y mi apoyo incondicionales”.
Ese señor fue promovido a Rector de la UCLV primero y de la capitalina Alma Mater después, llegó a ser diputado del parlamento cubano, y por último, embajador de la República de Cuba en un país este-europeo…, pero tuvo la “mala estrella” de ponerse a jugar con dólares, y ahí mismo, lo perdió todo.
Regresó a la mayor isla de las Antillas sin un ápice del prestigio revolucionario que con tanto celo había cuidado, y luego de estar acogido un tiempo al famoso “plan pijama”, fue ubicado en un cargo sin importancia en el Ministerio de Salud Pública, ya que —con esa mácula en su expediente— nadie quería trabajar con él, ni siquiera tenerlo cerca.
Lamentablemente, enfermó de una afección letal (cáncer), pero quien lo cuidó con afecto, sin el más mínimo asomo de odio o resentimiento, y le cerró los ojos el día en que falleció fue aquel hijo gay que aborreció y maldijo en una etapa del ciclo vital humano (la adolescencia), en que más se necesita el cariño filial y la valiosa ayuda que aporta la figura paterna.
El segundo caso tuvo lugar en La Habana, en la convulsa década de los ochenta: un día se aparece en mi casa, una señora, funcionaria del Ministerio de Relaciones Exteriores, recomendada por uno de mis compañeros de trabajo en la institución asistencial donde laboraba, para que yo atendiera a su hijo, un joven de veinte y tantos años de edad, historiador e investigador de un instituto de la Academia de Ciencias de Cuba (ACC), porque ella sospechaba que su vástago tenía un comportamiento sexual extraño, ya que solo salía con un solo amigo, y en ocasiones, ese joven se quedaba a dormir en su cuarto; relación íntima que el hermano descubrió un día en que regresó a la casa en horas de la mañana y los vio durmiendo abrazados en el “lecho nupcial”.
Con el mayor tacto posible, le expliqué a esa señora que la conducta sexual de su prole no era —como ella imaginaba— expresión de enfermedad mental ni de vicio o degeneración moral alguna, sino una variante del comportamiento sexual humano, según nos había explicado el eminente sexólogo alemán Siegfred Schnabl, quien —en 1979— impartiera una conferencia magistral sobre ese azaroso tema en el hospital gineco-obstétrico González Coro.
No satisfecha con mi respuesta, me preguntó si había algún psiquiatra que tratara esa “enfermedad”, porque ella tenía nociones de que un reputado especialista que conservaba su consulta particular en el Vedado tenía un tratamiento reflexológico para tratar la homosexualidad; terapia que consistía en mostrarle al individuo láminas de mujeres y hombres desnudos, y cuando el “paciente” seleccionaba la lámina donde aparecía una persona de su mismo sexo, se aplicaba un estímulo eléctrico a determinadas zonas erógenas. O sea, un electrochoque sexual.
Ante semejante tozudez, le comenté: señora, lleve a su hijo a quien usted decida, pero de antemano le digo que él no está enfermo, solo tiene una orientación sexual diferente, que se debe respetar.
Antes de concluir la conversación, me preguntó si debía notificar esa situación al Comité del Partido al que pertenecían su esposo y ella, y le contesté  —enfáticamente— que esa situación era íntima, familiar, que no debía trascender el contexto hogareño.
Sin embargo, lo primero que esa señora hizo cuando salió de mi casa fue informar al Comité del Partido lo que había sucedido, así como a la jefatura de Personal del instituto de investigación donde el muchacho ejercía. ¿Se imaginan cuál fue la “orientación”? “Hay que botarlo de la casa y del trabajo, porque ustedes no pueden convivir con un homosexual ni puede continuar ni un minuto más en esa dependencia de la ACC, porque la desacredita”. Y así se cumplió.
El resultado de ese atropello fue desastroso: el joven hizo un intento suicida, que requirió su ingreso a una institución de salud mental, donde el jefe de servicio —la ética médica, el humanismo y la espiritualidad personificados— lo atendió, y la primera acción terapéutica que emprendió, fue citar a los progenitores del paciente y explicarles —con lujo de detalles— el craso error que habían cometido con su hijo, y con toda la profesionalidad que lo caracteriza, les exigió con respeto, pero con firmeza, reintegrarlo al seno familiar cuando estuviera de alta.
En ese lapso, se presentó la salida por el Puerto de Mariel y ese maltratado ser humano, optó por irse bien lejos no solo de los padres, quienes tanto daño psíquico, moral y espiritual le habían hecho, sino también de la patria donde nació, creció, y nunca dejó de amar.
Los remordimientos y los sentimientos de culpa que incubaron en la mente y en el alma por la injusticia que habían cometido contra su hijo menor, terminó con sus vidas, sin que jamás recibieran noticias de él.
El tercer episodio de esta serie se desarrolló, en 1979, en el hospital gineco-obstétrico González Coro (ya hice alusión a esa actividad cuando relaté el caso anterior). En esa sesión científica, coordinada por la Dra. Mónica Krause y el Prof. Dr. Celestino Álvarez Lajonchere (fallecido), participamos psicólogos,  psiquiatras, especialistas en Gineco-obstetricia y algunos clínicos.
El tema era la posible eliminación de la homosexualidad del Glosario Internacional de Enfermedades Mentales, mientras que el ponente fue el Prof. Dr. Siegfred Schnabl, profesor de Sexología en un centro de educación superior de la desaparecida República Democrática Alemana (RDA).
Cuando el disertante invitado definió la homosexualidad como una variante del comportamiento sexual humano y abogó no solo a favor de la eliminación de la homosexualidad como una entidad nosográfica, sino de su despenalización como figura delictiva en el vigente Código Penal, la reacción del auditorio devino un verdadero escándalo, porque no entendían —no lo podían entender en aquel momento socio-histórico— que un militante del Partido Socialista Unificado Alemán defendiera a capa y espada a los homosexuales.
Fíjense, estoy hablando de profesionales de la salud y no de personas desconocedoras de esos temas. Tanto malestar causó la cálida defensa que hiciera el doctor Schnabl de sus planteamientos, que varios de los presentes no vacilaron en acusarlo de ser gay y de muchas cosas más que la ética periodística no me permite llevarlo a la página en blanco.
Por lo tanto, lo que le sucedió al ingeniero granmense es una más de esas aberraciones en las que suelen incurrir quienes están paralizados en el tempo psíquico por el “marabú” mental que no los deja crecer, y por ende, se quedarán enanos ante los desafíos del nuevo siglo.

12/17/2011

HxD integra a la comunidad LGBT y H

Jueves, 15 de Diciembre de 2011 17:05 La Habana, IPS CUBA

 

En sus talleres realizados durante 2011 por diferentes zonas del país, el grupo de Hombres por la Diversidad (HxD), acompañado por el estatal Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), continúo sus acciones para reunir a personas de toda la diversidad sexual, en la formación en derechos sexuales y reproductivos.

Esta capacitación incluye “los Principios de Yogyakarta, para que los activistas tengan herramientas en materia de derecho para dialogar con Estados y Gobiernos, y lograr una incidencia política”, explicó Alberto Roque a la Redacción de IPS en Cuba, coordinador de HxD en la capital.

El documento, redactado en noviembre de 2006 en la mencionada ciudad indonesa, contiene una serie de principios legales cuyo fin es la aplicación en el campo de los derechos humanos de los derechos en relación a la libre orientación sexual e identidad de género.

En dos de los tres cursos desarrollados este año, informó, se logró la participación conjunta de hombres de sexualidades diversas –que incluye a la heterosexualidad-, lesbianas y trans, integrantes de las diferentes redes sociales que acoge el Cenesex, para cumplir el objetivo de unidad que se trazó en su fundación el 27 de agosto de 2010.

“Constatamos los resultados del proceso de maduración de los activistas, que ya manejan con soltura términos asociados a la libre orientación sexual e identidad de género y legalidad”, valoró el también médico.

Por otra parte, el coordinador de HxD-Cienfuegos, a 256 kilómetros al sureste de La Habana, Alain Darcourt quedó como responsable de la búsqueda de nuevas alianzas en la zona central del país para concretar más actividades de conjunto con la comunidad LGBT y H (lesbianas, gays, bi, trans y heterosexuales), reveló Roque.

Hasta el momento, el mencionado grupo cuenta con su homólogo en Cienfuegos, cada uno con alrededor de 30 miembros, y fortalece su principal arista de trabajo que consiste en la acción política y capacitación en materia de derechos entre el activismo de la isla caribeña.

El 10 y 11 de diciembre, la iniciativa celebró el Día de los Derechos Humanos, cuando se cumplieron 63 años de la aprobación por Naciones Unidas de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, con una gala de transformistas y un taller de capacitación en la mencionada ciudad de la costa sur cubana, precisó el sitio web del Cenesex.

“Diversidad sexual y derechos humanos”, cofacilitado por Francisco Rodríguez y Camilo García, estuvo dirigido al intercambio entre los grupos HxD de Cienfuegos y La Habana, donde se analizaron temas como la homofobia, autoestima, empoderamiento, igualdad, estigma y no discriminación.

Asimismo, destacó en los debates el “necesario reconocimiento por los Estados y el Sistema de las Naciones Unidas” de los derechos sexuales y reproductivos como parte de los derechos humanos, reportó el Cenesex.

En la noche del 10 de diciembre, se celebró una gala por la no transfobia en el Teatro Luisa de esta ciudad cubana, donde participaron las transformistas Vida Valeria, Amanda de Gales, Sharom, Carolyn y Brandy, junto a la pareja de baile Manuel y Bismany, con la presentación de Felipe Ríos.

Entre el programa cumplido por la fecha, se incluyó la declaración oficial de Cienfuegos como la sede de la V Jornada Cubana contra la Homofobia, auspiciada por el Cenesex y otras instituciones del país, a celebrarse alrededor del 17 de mayo de 2012.

Por segunda ocasión consecutiva, HxD celebra el Día de los Derechos Humanos para visualizar las necesidades de reconocimiento en ese sentido de la diversidad sexual en Cuba.

En 2010, el grupo realizó por la fecha la presentación del documental “El Che de los gays”, sobre el activista chileno Víctor Hugo Robles, y un debate sobre los Principios de Yogyakarta, como parte de la Jornada por el Día Internacional de la No Violencia contra las Mujeres, organizada por el Cenesex del 6 al 10 de diciembre en el capitalino Hotel Lincoln.

12/14/2011

Música para las lobas

por  Lester Vila

Tomado de Cubasí.cu

Un amigo me ha dejado en la computadora una carpeta con canciones preferidas por los transformistas. Al menos, por los transformistas cubanos, porque canciones de Minelli, Streissand, Mina o Dalida, íconos para travestis del espectáculo de otras latitudes, no hay en esta selección. Aquí, por supuesto, se enseñorea lo hispano. Junto a las voces de agudo desgarrón de Valeria Lynch y Amanda Miguel, «clásicas» en estas lides, aparecen otras más jóvenes como Malú, Anaís. También Gloria Trevi y Mónica Naranjo, Thalía, Marta Sánchez y Yuri, han sido entronizadas en las últimas décadas. Las cubanas también clasifican en el listado: tres «inolvidadas» se dan la mano en los escenarios: Annia Linares, Mirtha Medina y Maggie Carlés. Junto a ellas, Lourdes Torres, autora e intérprete de canciones en las que flota permanente una bofetada prometida. Alguna vez son incorporadas otras intérpretes como Rebeca o Hayla.

Tan antiguo como el mundo es el arte de dejar de ser para convertirse en un deseo. Reinas y hetairas, divas y bailarinas fueron duplicadas en fiestas de carnaval, en los escenarios burlescos, y en los salones privados. En la era pop que vivimos, los referentes también están definidos: las cantantes populares de cada época. Puede ser que hace 40 años, muchos imitaran a Rita Pavone y a Marisol. En los años 70, una reina podía tener la voz de Raffaella Carrá, y sacudir frenéticamente su cabellera rubia. Incluso, no dudo que hace 30 años Yordanka Christova y Alla Pugachova tuvieran sus adeptos, entre los soñadores con las grandes avenidas de la noche moscovita. Massiel y las Rocío aún permanecen por acá. De seguro que en Europa todas ellas todavía provocan más de una fantasía nocturna. 

¿Qué hace a una canción idónea para ser interpretada en un show de travestis? ¿Qué mujeres son dignas de imitar? Es evidente que no es cuestión de femineidad, ni de intensidad. Nunca he visto evocadas en estos escenarios a las personalidades avasalladoras de Janis Joplin o Edith Piaff. Amy Winehouse no ha sido musa, ni por su mítico cardado. La monolítica Sara Montiel es soslayada, al igual que la oportunidad de ponerse new look que ofrecen Marilyn Monroe y Connie Francis. Diamonds are Forever suena a cristales resplandecientes bajo los reflectores, pero Shirley Bassey es una completa desconocida. Los transformistas cubanos prefieren otros derroteros. ¿Falta de información o particular sensibilidad? Creo más en lo segundo que en lo primero.

También está la permanente condición ilusoria del transformista. Recuerdo que hace unos años, en una fiesta clandestina, un amigo en su afán por encender un cigarro, le acercó una fosforera a un transformista que acababa de ganar un concurso. «Mi vida, aparta eso de mí, que si me prende, voy a desaparecer en menos de un minuto», gritó el ganador llevándose las manos a la peluca rubia. Reconocía risueño su condición de criatura artificial, volátil, situada al borde y, por todo esto, dramática. Su belleza triunfante escondía un amasijo de nylon y papeles. Él, como cualquier transformista, no buscaba acercarse a la mujer física de cada día, preparada para la procreación, víctima de sudoraciones. Acaso desconocía que su real presunción era convertirse en estandarte de lo femenino extremo.

Un conocido siempre comenta que los travestis prefieren como patrón a las vampiresas, no buscan a una mujer en su valor. «En este empeño, una dama admirable como Marie Curie está descalificada». Ellos desean convertirse en un tipo utópico, izado en lo externo, tan imposible como abstracto. Externan una sensibilidad andrógina subyacente. Un travesti no busca representar a una mujer, sino convertirse en una manifestación fantasiosa de lo femenino. El afeite es la magia que transforma al sujeto en su opuesto: un muchacho pobre, acosado y tímido, será tras la máscara nocturna una ensoñación femenina, rutilante y peligrosa. Finalmente siempre subyace el deseo fatal por lo inalcanzable.

El travesti que dobla o canta canciones en escenarios, el transformista que solo reluce entre los arcos de la luz artificial, lleva ese empeño a los horizontes de espectáculo. Cúspide del kitsh homosexual, este artista espontáneo queda definido por su apariencia, pero también por la música que interpreta: canciones de hembras, femeninas y fuertes, deslenguadas, batalladoras, indoblegables, mujeres en las que colindan los valores establecidos para lo femenino y lo viril. La música es la voz y el sentimiento de la fantasía que ellos construyen artesanalmente. En casi todos esos temas melódicos hay una pena que no se puede sondear. El grito de la cantante es profundo e íntimo. Debe ser por eso que esta es la música preferida de los marginados entre los negados.

Estos cantos, femeninos y casi siempre machistas, temperamentales, manifiestan un deseo de sobrevida, son amenazas lanzadas por un animal acorralado. Como obras populares externan con simpleza sentimientos, deseos que no suelen ser dichos en alto, pero que desde la máscara pueden ser gritados como una voz general. Las melodías preferidas por los transformistas casi siempre están asociadas a la frustración. Por eso, estos hombres terminan convirtiéndose en un sueño doloroso. Algunos se estremecen en los suelos, simulan suicidios, sangramientos. Otros, en crescendo musical, se van desnudando, poco a poco, ante un público expectante. Al final, queda expuesta la tragedia: sin pelucas, caídas las lentejuelas, libres de postizos, en ellos pervive invicta la mujer extraordinaria.

CENESEX celebra el Día de los Derechos Humanos en Cienfuegos, con redes sociales LGBT y H

Por: Camilo García López-Trigo

 

Un taller de capacitación sobre “Diversidad sexual y derechos humanos”, dirigido al intercambio entre los grupos “Hombres por la Diversidad” (HxD) de Cienfuegos y La Habana, y un espectáculo de transformistas en el céntrico cine-teatro Luisa de la capital cienfueguera, fueron las principales actividades en las que participó el CENESEX para celebrar el Día de los Derechos Humanos este fin de semana, cuando se cumplieron 63 años de la aprobación por Naciones Unidas de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH).

En opinión de Alberto Roque y Alain Darcourt, coordinadores de los grupos HxD en La Habana y Cienfuegos respectivamente, el taller cumplió exitosamente con sus objetivos de profundizar en el estudio de la DUDH, con sus aciertos y limitaciones, y del reconocimiento de los derechos sexuales como derechos humanos indivisibles e interdependientes.

Mediante el uso de una metodología participativa y en un ambiente relajado, plural y democrático, unos 20 activistas cienfuegueros LGBT y H (incluyendo a los heterosexuales, como parte inseparable de la comunidad) debatieron sobre diversas temáticas, entre las que se destacaron: igualdad, no discriminación, estigma, derechos humanos, los derechos sexuales como derechos humanos y su necesario reconocimiento por los Estados y el Sistema de las Naciones Unidas.

También se discutió ampliamente sobre la homofobia, su interrelación con otras discriminaciones, autoestima, asertividad y empoderamiento. Se destacó además muy provechoso el intercambio entre ambos grupos para integrar las iniciativas educativas y de incidencia política por el reconocimiento y respeto a la libre y responsable orientación sexual e identidad de género a nivel nacional. En ese sentido, próximamente grupos de las redes sociales de trans y jóvenes también realizarán actividades en Cienfuegos, que será la sede de las actividades centrales de la 5ª Jornada Cubana contra la Homofobia, el 17 de mayo del próximo año.

En la noche del 10 de diciembre, se celebró una gala por la no transfobia en el Teatro Luisa, el de mayor capacidad de la ciudad y situado en el Prado de la ciudad conocida como “Perla del Sur”. En el espectáculo participaron las transformistas Vida Valeria, Amanda de Gales, Sharom, Carolyn y Brandy, junto a la pareja de baile Manuel y Bismany, con la presentación de Felipe Ríos.

Francisco Pérez, coordinador del proyecto HSH de Cienfuegos destacó, al inicio de la Gala y ante cientos de asistentes, el destacado trabajo realizado por el voluntariado en la prevención de las ITS y el VIH y en la vulnerabilidad social que representa la discriminación por orientación sexual e identidad de género.

Con relación al tema de la celebración, Alberto Roque resaltó que, a pesar de que la Declaración Universal de los Derechos Humanos no tiene carácter vinculante y de que su universalidad y aplicación práctica sigue siendo cuestionada en la actualidad, es considerada un marco referencial sobre los derechos humanos para el Sistema de las Naciones Unidas. Subrayó asimismo que se requiere avanzar mucho más en reconocimiento pleno de los derechos sexuales como derechos humanos, mientras existan 76 naciones en el mundo que condenen la homosexualidad, cinco de ellas con penas capitales.  

Reafirmó además la necesidad de avanzar en este aspecto en el contexto nacional y dijo que se hace necesario formar activistas que trabajen en la educación de la comunidad, de manera que puedan incidir políticamente en la eliminación de la discriminación por orientación sexual e identidad de género en Cuba.

11/21/2011

Lisandra y Lisbet celebran su amor públicamente" o "Necesidad de poner fin al vacío legal en relación a la protección de los derechos de las lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros en Cuba

Lisandra y Lisbet son una pareja de lesbianas de más de ocho años de relación estable, los sentimientos que las unen quedan fuera de toda duda, toda vez que decidieron celebrar públicamente su amor en una ceremonia que simulaba el ofrecimiento mutuo de sus votos, o más concretamente, unas nupcias simbólicas, (1) idea que fue apoyada inmediatamente por el grupo FENIX, red social que agrupa a las mujeres lesbianas, bisexuales y heterosexuales que deciden luchar por la diversidad sexual en Cienfuegos.

Pretendían con ello celebrar los avances que en el plano legislativo representa que las modificaciones al Código de Familia, donde finalmente se reconozca la unión legal entre personas del mismo sexo, este ya en manos del Ministerio de Justicia, casi listo para presentar el proyecto de ley ante el pleno de la Asamblea Nacional del Poder Popular, y también, la políticamente muy relevante mención que el Documento Base para la 1ra Conferencia Nacional del Partido Comunista de Cuba, hace de forma explícita a la necesidad de enfrentar los prejuicios […] ante [la] orientación sexual […] que puedan originar cualquier forma de discriminación o limitar el ejercicio de los derechos de las personas…

Pero sus deseos sufrieron un pertinaz desengaño, primero, aunque se cercioraron con autoridades jurídicas del territorio que podían realizar la representación varias instituciones se negaron a prestarle el servicio de alquiler del local a pesar de estar incluido dentro de su objeto social, y solo el Grupo Empresarial Palmares de Cienfuegos apoyó la iniciativa y extendió un contrato para dicha celebración; pero a pesar de que la pareja actuó de buena fe declarando sus intensiones a la gerencia, pocos minutos antes de iniciarse la actividad, altos funcionarios de Palmares se personaron en el lugar para delimitar algunas exigencias sobre su ejecución, las cuales no realizaron cuando se firmó el contrato y cobraron el dinero en cuestión.

Dichas exigencias, si bien algunas no dejaban de ser lógicas preocupaciones (canalizadas en el momento más inadecuado) como que ellos eran una entidad estatal y no podían consentir que se hablara de matrimonio, boda, o cualquier otro sinónimo, entre personas del mismo sexo, toda vez que no estaba aprobado por las leyes y no podían cometer una ilegalidad, de pronto, empezaron a extenderse sin límites las proscripciones y mutilaron el guión del espectáculo eliminando desde una simbólica Marcha Nupcial hasta una inofensiva Ave Maria, llegando al punto de prohibir la utilización de cualquier palabra que hiciera alusión a la naturaleza de la bella relación de pareja de Lisandra y Lisbet… total, que al final resultaron ser dos “amigas” (aunque vestidas de novias) celebrando el amor, sí, el abstracto amor del cual todos somos  depositarios y ninguna de las personas LGBT concretos hacedores (lamentablemente aun para muchos que no comprenden esta realidad).

Ante los cuestionamientos del que suscribe esta crónica, Coordinador de la Redes Sociales por la Diversidad en el territorio y Presidente de la Comisión Provincial de Educación Sexual, sencillamente respondieron que eran indicaciones que tenían sin aclarar de quien o donde estaban plasmadas, y más, personalmente me acotaron que incluso si las veían muy “echadas” una encima de la otra ellos tendrían que sacarlas, todo lo cual tuvo una serena pero enérgica respuesta basados en la legalidad y el más elemental respeto a los derechos humanos, a lo que replicaron con una petición que puede resumirse en que al final si se toma lo acontecido como tema (es decir, si trasciende) la soga se romperá por la parte más débil (ellos) pues los demás negarían tal indicación, revelando la doble moral evidente en el discurso de algunos decisores.

Pero lo contraproducente ocurrió más tarde cuando ante el despliegue de la bandera del arcoíris para realizarse unas fotos recibimos la orden de guardarla, o peor, cuando ante el beso inocente de otra pareja, un custodio señaló que podían ser expulsadas del lugar por ese hecho; y otra vez, ante los requerimientos acerca de la justificación de tal proceder, un funcionario de Palmares replicó sin más: yo me acojo al derecho de admisión.

Me pregunto entonces si no es una ilegalidad precisamente que una entidad pretenda establecer normas internas que contravengan las propias leyes del país, porque en Cuba desde las modificaciones al Código Penal a fines de los años 90, la homosexualidad dejó de ser penada por la ley; entonces, como entender que una pareja del mismo sexo pueda expresarse su afecto mutuo, incluso con un beso, delante de un agente del orden (PNR) quien no puede detenerlos por eso pues no violan ley alguna y si puedan los custodios de una entidad de Palmares expulsarlos de un centro recreativo por la misma razón (¿?)

¿A que leyes se acoge Palmares cuando, según su sacrosanto derecho de admisión, pueden expulsar a una pareja del mismo sexo que este bailando “muy juntas” o tengan alguna muestra “inadecuada” de afectos o pueden negarle la entrada a una pareja del mismo sexo (sobre todo hombres, con las mujeres aplican una mirada discrecional, en mi apreciación personal) porque la entrada es por parejas “normales” o pueden negarle la entrada a un trasgénero cualquiera solo por vestir acorde a su identidad sexual?(2).

¿Se rige Palmares por regulaciones legales propias? ¿Ignoran que en nuestro país, como política de estado, se desarrollan históricas jornadas por la libre y responsable orientación sexual e identidad de género desde hace 5 años; se batalla por conquistar toda la justicia social posible, por cambiar todo lo que deba ser cambiado, lo cual tendrá expresión jurídica y tiene ya concreción política expresa? ¿No han discutido aun el Documento Base del PCC para su 1ra Conferencia Nacional?... ¿hasta cuando  tendremos que soportar humillaciones como estas?

Al final, estas libres interpretaciones acerca de la igualdad de derechos consagrados en la Constitución de la República, solo confirman la necesidad de proteger jurídicamente de forma expresa y positiva los derechos de las minorías sexuales.

 

Alain Darcout Rodríguez, 08/11/11.

(1)       Las parejas del mismo sexo no disfrutan las garantías jurídicas que pueda ofrecerles el Estado, entre otras muchas, por ejemplo, sobre el patrimonio construido conjuntamente, pues aun no existe ninguna legislación al respecto en Cuba.

(2)       En verdad, estas disposiciones discriminatorias ocurren en la mayoría de los centros recreativos, estableciéndose, cuando más, días específicos destinados para esta población o solo lugares determinados, política que continúa segregando y no favorece la integración.

11/09/2011

Detrás del Barrio Rojo y delante de Cuba

Por Marta María Ramírez (CENESEX)

 

Un programa de cinco días llevó a la directora del Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) a Holanda, para realizar una serie de encuentros y conferencias sobre la educación sexual y estrategias para el activismo por los derechos sexuales de personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero (LGBT).

La sexóloga cubana fue invitada por el grupo de solidaridad con Cuba Plataforma Cuba-Nederland, el Centro de Investigaciones de Género y Sexualidad de Ámsterdam, el Centro Latinoamericano de Investigación y Documentación de la Universidad de Ámsterdam y la Embajada de Cuba en ese país.
Castro Espín recorrió el Centro Médico de la Universidad Libre de Ámsterdam y sus instalaciones dedicadas a la atención a personas transexuales. Además, participó en la conferencia internacional de Rutgers-WPF, organización encargada de amplios temas de educación sexual en ese país; sostuvo un encuentro con Katinka Lansing, representante del grupo Dance4Life, una experiencia de educación en diversas materias de sexualidad y prevención de las ITS y el VIH/sida mediante la cultura e impartió la conferencia Educación sexual y VIH/sida en la estrategia cubana de desarrollo humano, en el Instituto de Estudios Sociales de La Haya, en la que se presentó la experiencia cubana de educación sexual a estudiantes y profesores de ese centro, acompañada de la Embajadora de Holanda para el VIH/sida, Marike Wijnroks. 
En la agenda de Castro Espín destaca, por la cobertura mediática, la visita, coordinada con Radio Nederland, al Barrio Rojo de Ámsterdam, un sitio cuya publicidad no muestra lo que verdaderamente sucede detrás de sus vidrieras en las que se exhiben mujeres de carne y hueso para vender un único “producto” : su cuerpo.
En Holanda, no está penalizado el cliente. Las trabajadoras sexuales, término con el que muchas de estas mujeres se han reivindicado ante el mundo, están sindicalizadas. 

Detrás de la publicidad del Barrio Rojo
El Barrio Rojo ha sido históricamente conocido desde una perspectiva turística. Pero es triste que se exponga a la mujer como mercancía sexual porque son ellas las que permanecen detrás de las vitrinas con luces rojas y ropa interior: hay un área de jóvenes, muy bonitas, que son inmigrantes de Europa del Este, una de latinas y otra de holandesas.
Detrás de esta imagen, edulcorada por la publicidad, se esconde también el tráfico de personas y muchos otros problemas como la violencia de género y el tráfico de drogas.
Me conmovió imaginar la vida de estas personas en situación de explotación, no solo por ser trabajadoras sexuales, como se les reconoce, sino también por ser mujeres y en muchos casos inmigrantes. 
La mayoría de los países que integran la Unión Europea carecen de políticas estatales  para incidir sobre las condiciones socio-económicas e ideológicas que generan la prostitución. La trata de personas asociada al servicio sexual es uno de los negocios de más rápido crecimiento después de la venta de armas y de drogas.
Por eso me gustó conocer sobre el trabajo que realizan algunas redes en la Unión Europea —como la Red Europea para la Prevención del VIH/ITS y la Promoción de Salud entre Trabajadoras Sexuales Inmigrantes, que me contactó durante esta visita—  y otras iniciativas para dignificar a las trabajadoras sexuales. Si al menos no las pueden ayudar a mejorar sus condiciones socio-económicas, por lo menos tratan de dignificar sus imágenes como seres humanos, además, abogan por sus derechos y particularmente por sus derechos laborales y de salud.
Hay otros grupos que enfrentan el tráfico de personas,  que constituye un problema muy grave en toda la Unión Europea y no todos los países se han puesto de acuerdo sobre el enfoque y las estrategias de enfrentamiento que favorezcan el respeto a los Derechos Humanos de estas mujeres.
Conocí a Mariska Majoor, del Centro de Información para la Prostitución, del Barrio Rojo. Ella ha hecho un trabajo muy importante para dignificar a las mujeres prostitutas en el Barrio Rojo. Incluso, erigió un monumento, La Belle, que elogié porque intenta modificar la imagen negativa y lastimosa que existe sobre ellas.

¿Una experiencia exportable a Cuba?
Esa pregunta me la hizo Radio Nederland en tres ocasiones y argumenté ampliamente por qué no es posible. Como ellos abogan por la libertad de prensa y de expresión, supongo que en algún momento publiquen todo lo que les comenté respecto a exportar la experiencia del Barrio Rojo a Cuba.
La periodista me preguntó, además, sobre una supuesta similitud entre el Malecón habanero y el Barrio Rojo; no tienen nada que ver. El Malecón es el lugar a donde va toda la población habanera y sus visitantes. Bajas por esas calles principales, que casi todas conducen al mar para disfrutar de su belleza y su agradable brisa ¿Qué allí suceden otras cosas? Pues sí, donde hay humanidad hay de todo.    

La prostitución femenina y la Revolución cubana
En 1959, existían más de 100.000 prostitutas en Cuba, sobre todo en la capital del país y en Caimanera1 , una zona que servía a los militares norteamericanos de la Base Naval de Guantánamo.
Al triunfo de la Revolución se establecieron políticas por los derechos de todas las mujeres, facilitando su integración a la sociedad, e incluso, se implementaron iniciativas de atención específicas para cambiar las condiciones que generaban la prostitución. Se penalizó la explotación de personas que incluye la condena al proxeneta, no a la prostituta.
Esta labor, liderada por la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), apuntó a la dignificación, no solo del pueblo cubano, que fue el propósito principal de la Revolución, sino de las mujeres y sobre todo de las que estaban sometidas a la explotación sexual.
Ellas pudieron alfabetizarse, encontrar empleo,  recibir asistencia médica especializada y asumir responsabilidades públicas. Este fenómeno reemerge como problemática social durante la crisis económica iniciada en 1990, pero con otras características, porque se trata de una población instruida, en un contexto socio-histórico muy diferente al de 1959. Los estudios socio-psicológicos y epidemiológicos realizados en esa etapa llamaron la atención sobre la práctica del sexo transaccional2 en hombres y de mujeres, y su vinculación a la epidemia del VIH-sida .

El sexo transaccional y Radio Nederland
En la nota de Radio Nederland aparece un fragmento de mi conversación en privado con Mariska Majoor, del Centro de Información para la Prostitución del Barrio Rojo.
Yo le contaba la experiencia de una mujer cubana que vino a pedir ayuda para reparar el daño de haber practicado el sexo transaccional con el fin de arreglar el baño de su casa.
Es una de las historias que utilizo para explicar estas complejas realidades; pero hay muchos más en todo el mundo, incluso sin distinción de clases sociales, porque en las clases pudientes también hay sexo transaccional, una práctica que tampoco hace distinciones de género ni de orientación sexual.
En Cuba existe una política explícita de atención no solo a la prostitución sino también al sexo transaccional, que es invisibilizado y su práctica es la punta del iceberg de problemáticas personales, familiares y sociales más complejas que requieren atención. Esta población está incluida en los públicos metas de nuestras campañas de prevención del VIH-sida y de la violencia de género.

El CENESEX y las personas transgénero
Durante mi visita, pude intercambiar con activistas por los derechos de lesbianas, gay, bisexuales, transgéneros e intersexuales (LGBT) de Europa y El Caribe, en el Instituto Internacional de Investigación y Educación de Ámsterdam.
En el debate se resaltó el modelo cubano de atención a personas transgénero por considerar que aborda en profundidad el reconocimiento y respeto de sus derechos humanos. También por desarrollar estrategias educativas que promueven cambios en la conciencia social, no solamente en las leyes, aunque también son necesarias y nosotros abogamos por ellas.  

¿Una política de saneamiento?: el debate a la cubana
No promovemos una política de saneamiento social. Es mucho más profunda. Se trata de trabajar por el respeto a la dignidad plena y a los derechos humanos de estas personas. Estas realidades hay que estudiarlas para poderlas abordar con todo rigor académico y asesorar en la toma de decisiones políticas.

La Conferencia del PCC
La Conferencia del Partido Comunista de Cuba (PCC) es ya un escenario para facilitar el debate político mediante un proceso de participación popular. Es una buena oportunidad para avanzar en el análisis y modificación de las revisar las políticas actuales sobre  el tema.

El caso sueco
Suecia tiene un trabajo admirable. Incluso el Cenesex, la FMC y otras organizaciones estamos estudiando la experiencia sueca que educa y penaliza al cliente, además de atender y hacer acompañamiento psicológico a las trabajadoras sexuales.
Considerar la prostitución como el oficio más antiguo del mundo es un eufemismo para perpetuarlo como negocio. Existe gracias al poder económico de unas personas sobre otras a quienes se les niegan mejores oportunidades. La demanda del servicio sexual en el mercado la mantiene el cliente, sobre la base de antiguas relaciones desbalanceadas de poder que generan explotación entre los seres humanos.

¿Desaparición del Barrio Rojo?: la polémica
Allí pude conocer directamente las contradicciones que genera este debate. Hay personas que abogan por el cierre del Barrio Rojo para evitar que prospere el tráfico de personas y la explotación sexual. Sin embargo, otras defienden su permanencia por considerar que el gobierno no tiene capacidad para generar empleos en el actual momento de fuerte crisis económica en la que hay millones de personas sin trabajo.
En Holanda, la prostitución es legal, no se penaliza al cliente. Las trabajadoras sexuales están sindicalizadas y pagan impuestos. Hay grupos que viven del comercio sexual y tienen muchos recursos e influencias para defender su permanencia; mientras que otros abogan por el derecho a ejercer el trabajo sexual. 
Estas son las contradicciones que aprecié. Me pareció interesante escuchar todos estos puntos de vista.


Notas:

1. Poblado limítrofe con la Base Naval de Guantánamo, un territorio cubano ocupado por Estados Unidos.
2.  El sexo transaccional,  conocido también como sexo de subsistencia o trabajo sexual informal, es un intercambio de sexo por bienes de consumo.

3.  Una mesa redonda con 25 activistas de diferentes organizaciones LGBT de Holanda se reunieron bajo el tema Estrategias de activismo LGBT y derechos de las personas transgénero.

10/10/2011

Resolución del Parlamento Europeo sobre Derechos Humanos, Orientación Sexual e Identidad de Género en Naciones Unidas

La Habana, 10/10/11. El Parlamento Europeo publicó el pasado 28 de septiembre una Resolución sobre Derechos Humanos, Orientación Sexual e Identidad de Género en las Naciones Unidas. El documento marca pautas en el avance en la inclusión de los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros en el sistema de las Naciones Unidas, como parte importante del proceso de reconocimiento de los derechos sexuales como derechos humanos universales e indivisibles por los estados y gobiernos miembros de este organismo internacional. La resolución de este grupo regional, secunda a una iniciativa similar de su homólogo en las Américas.

Se resalta  el texto de la resolución en la que el  Parlamento Europeo manifiesta su “condena con la máxima firmeza el hecho de que en algunos países, incluso en el seno de la UE, todavía se perciba la homosexualidad, la bisexualidad o la transexualidad como una enfermedad mental, y pide a los diferentes Estados que luchen contra este fenómeno; pide, en particular, la desiquiatrización de la vivencia transexual y transgénero, la libre elección del equipo encargado del tratamiento, la simplificación del cambio de identidad y la cobertura por parte de la seguridad social”.

También se destaca la propuesta del Parlamento Europeo a la Organización Mundial de la Salud, referente a la retirada de la Transexualidad y las identidades transgénero de la Clasificación Internacional de Enfermedades en su 11na edición, al manifestar que:  “ (…)se  supriman los trastornos de identidad de género de la lista de trastornos mentales y del comportamiento, y que garanticen una reclasificación de dichos trastornos como trastornos no patológicos en las negociaciones de la undécima versión de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11).”

Dicho enfoque es promovido desde la Sociedad Cubana Multidisciplinaria para el Estudio de la Sexualidad (SOCUMES), a propuesta de la Comisión Nacional de Atención Integral a Personas Transexuales y se refleja en una declaración emitida en 2010.

 

      Sección Diversidad Sexual
   Sociedad Cubana Multidisciplinaria
     para el Estudio de la Sexualidad
                      

 


Resolución del Parlamento Europeo, de 28 de septiembre de 2011, sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género en las Naciones Unidas

 

El Parlamento Europeo,

 

–  Vistos la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Convenio Europeo de Derechos Humanos y la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea,

 

–  Vista la Resolución A/RES/60/251 de la Asamblea General de las Naciones Unidas por la que se establece el Consejo de Derechos Humanos (CDHNU),

 

–  Vista la Declaración de 16 de marzo de 2006 de la Presidencia del Consejo de la Unión Europea en nombre de la Unión Europea sobre el establecimiento del CDHNU,

 

–  Vista su Resolución, de 10 de marzo de 2011, sobre el decimosexto periodo de sesiones del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas(1) ,

 

–  Vista su Resolución, de 16 de diciembre de 2010, sobre el Informe anual sobre los derechos humanos en el mundo (2009) y la política de la Unión Europea al respecto(2) ,

 

–  Vistas las anteriores declaraciones conjuntas ante las Naciones Unidas, incluidas la Declaración conjunta para poner alto a los actos de violencia y a las violaciones de derechos humanos dirigidos contra las personas por su orientación sexual e identidad de género, presentada el 22 de marzo de 2011 ante el Consejo de Derechos Humanos, y la Declaración sobre derechos humanos y orientación sexual e identidad de género, presentada el 18 de diciembre de 2008 ante la Asamblea General,

 

–  Vista la Resolución A/HRC/17/19 del CDHNU, de 17 de junio de 2011, sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género,

 

–  Vistos el decimoséptimo periodo de sesiones del CDHNU, en el que se adoptó la Resolución A/HRC/17/19 sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género, y el decimonoveno periodo de sesiones del CDHNU, en el que se celebrará la mesa redonda que establece la Resolución A/HRC/17/19,

 

–  Vistas la Resolución 1728 de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, de 29 de abril de 2010, sobre la discriminación basada en la orientación sexual y la identidad de género y la Recomendación del Comité de Ministros CM/Rec(2010)5 de 31 de marzo de 2010 sobre medidas para combatir la discriminación basada en la orientación sexual o la identidad de género,

 

–  Vista la Resolución AG/RES. 2653 de la Organización de Estados Americanos, de 7 junio 2011, sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género,

 

–  Visto el informe de la Agencia de los Derechos Fundamentales sobre homofobia, transfobia y discriminación por razones de orientación sexual e identidad de género, de noviembre de 2010,

 

–  Vistos los artículos 2, 3, apartado 5, 18, 21 y 27 del Tratado de la Unión Europea y el artículo 10 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea,

 

–  Visto el Manual del Consejo de la Unión Europea para promover y proteger el disfrute de todos los derechos humanos por parte de las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero,

 

–  Vista la Declaración de la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad/Vicepresidenta de la Comisión sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género ante las Naciones Unidas,

 

–  Visto el apartado 2 del artículo 110 del Reglamento,

 

A.  Considerando que el respeto de los derechos humanos y el fomento y la protección de su carácter universal forman parte del acervo ético y jurídico de la Unión Europea y constituyen una de las piedras angulares de la unidad e integridad europeas;

 

B.  Considerando que diariamente se cometen numerosas violaciones de los derechos humanos relacionados con la orientación sexual y la identidad de género tanto en la Unión Europea como en terceros países;

 

C.  Considerando que la Unión Europea y sus Estados miembros deben garantizar el respeto de los derechos humanos en sus propias políticas y prácticas, con el fin de reforzar y dar credibilidad a la posición de la Unión Europea en el CDHNU;

 

D.  Considerando que la Unión Europea atribuye una importancia primordial a los derechos humanos universales e indivisibles;

 

E.  Considerando que la Unión Europea ya incluye la orientación sexual y la identidad de género en su trabajo en las Naciones Unidas, en organismos regionales y en el marco de algunos de sus diálogos bilaterales sobre derechos humanos;

 

F.  Considerando que la Resolución del CDHNU sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género es la primera resolución adoptada en las Naciones Unidas que trata específicamente de la orientación sexual y la identidad de género;

 

G.  Considerando que Estados de todas las regiones, incluidos todos los Estados miembros de la UE en el CDHNU, votaron a favor de la Resolución sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género, y que veintiún Estados miembros de la UE patrocinaron la Resolución;

 

H.  Considerando que varios órganos de las Naciones Unidas creados en virtud de tratados de derechos humanos, relatores especiales y agencias especializadas, así como el Secretario General de las Naciones Unidas y Alto Comisionado para los Derechos Humanos han manifestado su grave preocupación por las violaciones de los derechos humanos que sufren las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgénero (LGBT) en todo el mundo;

 

I.  Considerando que otras instituciones regionales, incluidos el Consejo de Europa y la Organización de Estados Americanos, han adoptado recientemente resoluciones en las que condenan las violaciones de los derechos humanos por motivos de orientación sexual e identidad de género;

 

1.  Reitera su preocupación por las numerosas violaciones de los derechos humanos y la discriminación generalizada por motivos de orientación sexual e identidad de género, tanto en la Unión Europea como en terceros países;

 

2.  Reconoce y apoya el trabajo ya emprendido por el Consejo de Derechos Humanos, el Secretario General de las Naciones Unidas, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos, los órganos de las Naciones Unidas creados en virtud de tratados de derechos humanos, relatores especiales y otras agencias de la Naciones Unidas para garantizar la plena vigencia de las normas internacionales de derechos humanos, con independencia de la orientación sexual y la identidad de género de las personas;

 

3.  Celebra la aprobación de la Resolución A/HRC/17/19 sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género por el CDHNU;

 

4.  Llama la atención sobre el hecho de que la resolución recibió el apoyo de Estados de todas las regiones y fue redactada por Sudáfrica; reitera que los derechos humanos son universales e indivisibles y se aplican a todos por igual, con independencia de la orientación sexual y la identidad de género;

 

5.  Apoya la organización de una mesa redonda durante el decimonoveno periodo de sesiones del CDHNU, en la primavera de 2012, para mantener «un diálogo transparente, informado y constructivo sobre el tema de las leyes y prácticas discriminatorias, así como los actos de violencia contra las personas basados en su orientación sexual y su identidad de género»; considera indispensable mantener un diálogo respetuoso y abierto sobre derechos humanos, orientación sexual e identidad de género entre Estados miembros de las Naciones Unidas de todas las regiones;

 

6.  Celebra el apoyo permanente de los Estados miembros de la UE y de la Vicepresidenta de la Comisión y Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad a la inclusión de la orientación sexual y la identidad de género en los trabajos del CDHNU y otros organismos de las Naciones Unidas, incluso en el caso de anteriores declaraciones y declaraciones conjuntas;

 

7.  Recuerda que el Manual para promover y proteger en el futuro el disfrute de todos los derechos humanos por parte de las personas LGBT, del Consejo de la Unión Europea, también menciona entre las prioridades clave la despenalización de la homosexualidad en todo el mundo, la igualdad y la no discriminación, así como la protección de los defensores de los derechos humanos; opina que la Alta Representante, todas las instituciones de la UE y los Estados miembros deben defender sistemáticamente estas prioridades a nivel interno en las relaciones exteriores;

 

8.  Pide a la Alta Representante y a los Estados miembros que, en asociación con terceros países, promuevan sistemáticamente la protección y el respeto de los derechos humanos en lo referente a la orientación sexual y la identidad de género en las Naciones Unidas y otros foros multilaterales, y de manera bilateral en sus diálogos sobre derechos humanos;

 

9.  Anima a los Estados miembros a que, de manera constructiva y en asociación con terceros países, participen en el Examen Periódico Universal y en procedimientos de órganos creados en virtud de tratados para velar por el pleno respeto de los derechos humanos en relación con la orientación sexual y la identidad de género en la Unión Europea y en terceros países; anima a los Estados miembros y a la Alta Representante, con este fin, a que velen por la coherencia entre la acción interior y la acción exterior de la UE en el ámbito de los derechos humanos, con arreglo a lo dispuesto en el artículo 21, apartado 3, del Tratado de la Unión Europea;

 

10.  Pide a la Alta Representante, a la Comisión y a los Estados miembros que, en asociación con terceros países, también promuevan los derechos humanos en relación con la orientación sexual y la identidad de género mediante diálogos bilaterales sobre derechos humanos y el Instrumento Europeo para la Democracia y los Derechos Humanos (IEDDH) y otros instrumentos de financiación exterior;

 

11.  Lamenta que los derechos de las personas LGBT aún no se respeten siempre plenamente en la Unión Europea, en particular el derecho a la integridad física, el derecho a la vida privada y la vida familiar, el derecho a la libertad de opinión y de expresión, el derecho a la libertad de reunión, el derecho a la no discriminación, el derecho a la libertad de circulación incluido el derecho a la libertad de circulación para las parejas del mismo sexo y sus familias, el derecho a acceder a la atención sanitaria preventiva y a beneficiarse de la atención sanitaria y el derecho de asilo;

 

12.  Recuerda a los Estados miembros la obligación de proteger o conceder asilo a los nacionales de terceros países que huyan o corran el riesgo de ser perseguidos en sus países de origen debido a su orientación sexual, tal como se estipula en la Directiva 2004/83/CE(3) por la que se establecen normas mínimas relativas a los requisitos para el reconocimiento y el estatuto de nacionales de terceros países o apátridas como refugiados o personas que necesitan otro tipo de protección internacional y al contenido de la protección concedida;

 

13.  Condena con la máxima firmeza el hecho de que en algunos países, incluso en el seno de la UE, todavía se perciba la homosexualidad, la bisexualidad o la transexualidad como una enfermedad mental, y pide a los diferentes Estados que luchen contra este fenómeno; pide, en particular, la desiquiatrización de la vivencia transexual y transgénero, la libre elección del equipo encargado del tratamiento, la simplificación del cambio de identidad y la cobertura por parte de la seguridad social;

 

14.  Llama la atención sobre las constataciones expuestas por la Agencia de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea en su informe sobre homofobia, transfobia y discriminación por razones de orientación sexual e identidad de género; pide a la Comisión y a los Estados miembros que actúen en relación con las opiniones recogidas en el informe en la mayor medida posible;

 

15.  Pide a los Estados miembros, a la Comisión y al SEAE que remedien plenamente estas desigualdades; pide una vez más a la Comisión que presente un plan de trabajo exhaustivo contra la homofobia, la transfobia y la discriminación por razones de orientación sexual e identidad de género;

 

16.  Pide a la Comisión y a la Organización Mundial de la Salud que supriman los trastornos de identidad de género de la lista de trastornos mentales y del comportamiento, y que garanticen una reclasificación de dichos trastornos como trastornos no patológicos en las negociaciones de la undécima versión de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-11);

 

17.  Encarga a su Presidente que transmita la presente Resolución a la Vicepresidenta de la Comisión/Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, a la Comisión, al Consejo de la Unión Europea, a los Gobiernos y los Parlamentos de los Estados miembros, al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos y al Secretario General de las Naciones Unidas.

 

Fuente: Sitio Oficial de la Unión Europea

 

El destaque en negritas hace referencia a los aspectos que nuestra redacción le concede mayor importancia,  en el contexto de la  polémica actual en el marco académico, político y de defensores de los DDHH LGBTI.

 

10/04/2011

¿Dignificar lo indignificable?

Por: Alain Darcourt, coordinador del Grupo HxD Cienfuegos

 

Hace unos años cuando comenzaban en nuestro país las campañas por el respeto a la libre y responsable orientación sexual, un amigo en tono de broma me comentaba no hay pájaro bueno ni tamarindo dulce reproduciendo en una frase todos los mitos, prejuicios y creencias negativas que el desconocimiento de la realidad homosexual ha ido construyendo en el imaginario colectivo, que incluye obviamente a las mismas personas sexo diversas. Como argumentos: las conductas llamativas, el cambio frecuente de pareja, la pérdida de valores, el comportamiento social…

Cuando confronté sus argumentos con los míos, contrarios a su afirmación, digamos que, cuando menos, en todos los grupos humanos hay personas comunes, con una vida responsable, productiva para si mismos, su pareja, familia y para la sociedad, personas excepcionales por su desempeño político, científico, artístico, militar, patriótico y en diversas esferas de la vida y personas patológicas o desviadas en lo personal y/o lo social: con trastornos de personalidad, u otros trastornos más o menos profundos… me replicó: si, pero fíjate en todos esos “bajiticos” y en los travestis…

Después de varias horas de discusión convenimos que no pueden pagar justos por pecadores, y comprendió que la homosexualidad es una orientación sexual que en sí misma sólo tiene efectos menores sobre el desarrollo de la personalidad (como cualquier identidad asumida sobre las configuraciones de sentido que integran la personalidad, digamos por ejemplo la propia heterosexualidad o las creencias religiosas) y sobre todo, que los múltiples condicionamientos de crianza, educativos, de género, los medios de comunicación y muchos otros factores sociales, son los determinantes en la conformación de las actitudes y conductas de los sujetos.           

Recordaba que Schofield, psicólogo norteamericano apuntó: “Muchos de los problemas que abruman al homosexual son creados por la hostilidad de la sociedad… las actitudes, no del homosexual, sino de las demás personas hacia esta condición, crean una situación que puede tener un efecto profundo en el desarrollo de la personalidad y puede conducir a un deterioro del carácter de un género que impide la integración efectiva en la comunidad…”                                                                                                       

Las personas con una orientación sexual e identidad de género diferente a la heterosexualidad dominante construyen su identidad sexual y personal con los referentes más negativos que sobre sí mismos va naturalizando nuestra cultura desde la familia, la escuela, las organizaciones sociales, los medios masivos de información y el resto de los elementos que intervienen en la educación y formación del sujeto; educándose además en ambientes que tienden a ridiculizar, agredir y cuestionar la homosexualidad, observando como modelo la relación heterosexual y los roles estereotipados de género, y en los peores casos, viviendo en condiciones de marginalidad que los convierte en individuos especialmente vulnerables ante el abandono temprano del sistema educativo, la falta de una profesión, la ausencia del grupo primario de apoyo y contención que es la familia, la baja autoestima, la inseguridad, la ira, la depresión, la desesperanza, el temor, la frustración…

La comprensión de esta difícil realidad es compleja para los hombres y mujeres heterosexuales, lejos de este sufrimiento, cuyas creencias se convierten en productos enquistados de los condicionamientos de su tiempo, mucho peor si no tienen una formación humanista, y que asumen que el comportamiento social “irritante” (de una parte de ellos) debe ser el comportamiento de todos “los de su especie” y que la causa fundamental, sino la única, está en “la perversión moral que entraña” (como le escuché decir a un funcionario). Visto así, la homofobia es innegablemente un mecanismo represivo que utiliza el poder patriarcal para perpetuar su hegemonía desde el heterosexismo, por tanto, es política y es ideología.

Al respecto, el sociólogo francés Louis-Georges Tin decía “por lo demás, las teorías teológicas, morales, jurídicas, médicas, biológicas, sicoanalíticas, antropológicas, etc, nunca son más que razones inventadas para justificar después una convicción íntima, evidentemente injustificable, según los dispositivos en consonancia con las creencias del momento... “, dispositivos generadores de poder según Foucault. La reacción esencia de estos sujetos ante la otredad sexual puede definirse con las palabras de Margarite Yourcenar, en su obra “Alexis o el Tratado del Inútil Combate”: …echan la culpa a los malos ejemplos, al contagio moral y sólo retroceden ante la dificultad de explicarlos. No saben que la naturaleza es más diversa de lo que suponemos: no quieren saberlo porque les es más fácil indignarse que pensar…

Pero lo que resulta verdaderamente lastimoso, es encontrar todavía en boca de gays, lesbianas, bisexuales y transgéneros (LGBT), frases despectivas, cuando no abiertamente homofóbicas hacia sus iguales, máxime cuando experiencias de vida similares han acontecido, y resulta fácilmente entendible que quienes no tuvieron la suerte de enfrentar contextos menos estigmatizantes y discriminatorios y no han logrado escalar en el orden social o de crecimiento personal y espiritual, se debe fundamentalmente a no haber podido encontrar un resquicio ante las generalizadas actitudes y prácticas de una homofobia sistemática, y la capacidad adaptativa de desarrollar mejores habilidades sociales para ser menos vulnerables. ¿Son por ello seres inferiores carentes de derechos? Ya sabemos a donde han conducido las teorías de la selección natural aplicadas a la sociedad.

Claro que también las personas con sexualidades no heterosexuales, en su ignorancia acrítica, reproducen los estereotipos y argumentos que los centros de poder generan acerca de los fenómenos periféricos (como ocurre alrededor del color de la piel, los orígenes étnicos, por razones religiosas, culturales, etc), pero cuando estas posiciones son asumidas por ciertos individuos de la comunidad LGBT habitualmente marginados que ahora pretenden asumir las reglas del juego discriminatorio para coquetear con mejores posiciones sociales o el poder mismo, ¿acaso hay mayor falta de dignidad que la prostitución del alma y el carácter? para quienes las banderas que ha levantado Mariela (y todos los que nos hemos sumado a ese activismo) no valen la pena porque no se puede dignificar lo indignificable… sin dudas, lo lastimoso se vuelve agraviante, desde sus egos deformados, y más, también sabemos que significa personificar en la directora del CENESEX y esta institución, lo que constituye una política de estado para conquistar toda la justicia social posible.

En este caso si recordé a mi abuelita y la siempre cuestionable sabiduría popular: no hay peor cuña que la del mismo palo.

01/10/11